Consejos de moda: piedras preciosas, diamantes y perlas

PIEDRAS PRECIOSAS

Las piedras preciosas naturales las proporciona la misma naturaleza y se pueden medir en función de su peso, quilates, tamaño o talla. O por varios parámetros a la vez.

Aunque la piedra sea natural puede haber sido tratada y este hecho debería ser advertido por su joyero antes de realizar una posible compra.

Otras piedras preciosas son creadas en un laboratorio y son más asequibles económicamente que las obtenidas naturalmente. Este tratamiento de las piezas debe ser identificado, con el objetivo de que el posible comprador conozca su procedencia.

Una gema puede haber sido tratada con calor, irradiada para que tenga más color, rellenadas algunas grietas o fracturas, impregnadas con aceites sin color o cera para disimular las imperfecciones, y teñidas o blanqueadas.

Este tipo de mejoras en las piedras también afectarán al precio final de la misma y esto habrá que tenerlo en cuenta.

DIAMANTES

Si vuestra debilidad son los diamantes hay que tener presente que su valor basado en cuatro criterios: el corte, el color, la claridad y los quilates. El color y la claridad están graduados, aunque las escalas no son siempre uniformes.

Solamente si no posee imperfecciones superficiales o internas visibles un diamante puede ser considerado como sin fallas. En algunos casos estas piezas pueden ser tratadas con el fin de mejorar sus características o apariencias.

PERLAS

En el mercado existen perlas naturales, que son las que fabricadas por las ostras y otros moluscos, aunque es muy difícil encontrarlas.

Por otro lado, las perlas cultivadas se diferencian en que, aunque también son fabricadas por moluscos, en el proceso interviene la acción del hombre. Esta clase de piezas, así como las de imitación, son las más fáciles de localizar en el mercado y económicamente son más asequibles.