Comenzamos desmontando el marco de la toma de la pared.
Pelamos el cable unos 25 mm.
Cortamos ese trozo de regleta rígida del interior para seguir trabajando cómodamente.
Si os fijáis bien tenemos dos opciones a la hora de conectar los cables. La combinación A o la B. En este caso, por normativa, tendremos que guiarnos por la B.
Posicionamos los cables para poder direccionarlos bien y los introducimos por sus orificios. Después, colocamos cada cable en su correspondiente prisionero.
Cortamos el sobrante, lo encajamos en la toma y cerramos estas dos pestañas.
A continuación sólo tenemos que encastrarlo en la pared y colocar el embellecedor.
Ya tenemos lista la clavija RJ45 hembra para realizar las conexiones que necesitemos cómodamente.