Entre los diferentes tipos de paneles que podemos encontrar en el mercado, nosotros nos hemos decantado por este modelo, cuyas piezas tienen forma cuadrada y miden 30 centímetros tanto de ancho como de la largo. Su instalación es muy sencilla.
Para realizar cualquier composición, necesitamos un panel principal en kit y varios secundarios.
Damos la vuelta a las piezas, las colocamos sobre una superficie plana y las unimos entre sí, insertando los cables en sus correspondientes salidas.
A continuación, recogemos los cables y los sujetamos con las bridas.
Para reforzar la estructura, atornillamos las placas metálicas en su posición.
Es el turno de la instalación. Ayudándonos de un nivel láser, colocamos la plantilla en la pared.
Teniendo en cuenta la composición que hemos creado, hacemos los agujeros en la pared, utilizando el taladro en posición de percusión y una broca de widia del diámetro adecuado.
Después, insertamos los tacos, ponemos los colgadores y suspendemos la luminaria.
Por último, enchufamos y comprobamos que la instalación funciona correctamente.
Gracias a estos paneles, que se unen fácilmente entre sí, podemos crear composiciones únicas y personales para las diferentes estancias de la casa.