Consejos para la cata

¿Qué debemos hacer cuando llevamos un vino a la boca?

Primero hay que mantenerlo en la boca y aspirar para oxigenarlo, ya que ese oxígeno va a empujar todos los aromas al bulbo olfativo, un nervio que actúa como sensor y envía una señal al cerebro cuando detecta las moléculas aromáticas para que las identifique.

Después de aspirar hay que mover el vino por la boca y tragarlo suavemente.

¿Qué sensaciones suele dejar el vino?

Al principio se puede notar una ligera efervescencia debido al carbónico, las burbujas, que contiene el vino. Por otra parte, puede dejar algo de sequedad en las encías, una sensación áspera y vegetal llamada astringencia que destaca en algunos vinos.

Por otra parte, si el vino tiene un posgusto largo, se debe a que tiene muchos aromas por vía retronasal.