Bruno Oteiza vuelve a sorprendernos con una nueva receta que no dejará indiferente a nadie: pastel de pescado y más concretamente, de cabracho.
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Pescados y mariscos
Bruno Oteiza vuelve a sorprendernos con una nueva receta que no dejará indiferente a nadie: pastel de pescado y más concretamente, de cabracho.
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Para la mahonesa:
Pon a calentar abundante agua con sal en una cazuela. Trocea la zanahoria y la cebolleta e incorpora. Vierte el vino blanco, espolvorea con un poco de pimienta molida y añade las hojas de laurel. Cuando el agua rompa a hervir, agrega el cabracho y cuécelo durante 10 minutos. Desmígalo.
Casca los huevos y viértelos a un cuenco. Añade la nata, la salsa de tomate, la pimienta y la sal. Mezcla bien con una varilla e incorpora el pescado bien desmigado (repasa bien por si tiene alguna espina), espolvorea nuevamente con pimienta y vuelve a mezclar.
Unta el interior del molde con mantequilla y harina. Coloca una tira larga de papel de horno sobre la base del recipiente y deje que cuelgue por los dos lados más cortos. Vierte la crema y pon el molde al baño maría. Hornea a 175º C durante 1 hora.
Para la mahonesa, bate el huevo con un chorrito de limón, unas gotas de vinagre, abundante aceite y una pizca de sal.
Corta el calabacín en cintas alargadas y delgadas con una mandolina. Saltéalas vuelta y vuelta en una sartén con un poquito de aceite. Corta el pastel en dados y enrolla cada uno en una cinta de calabacín.
Decora el plato con una tira de calabacín, coloca encima los pastelitos enrollados y con un poco de mahonesa. Dale un toque con la vinagreta y decora con el cebollino