
Enrique Fleischmann
Canastillas de setas
Enrique Fleischmann, 27 de septiembre de 2016
El cocinero Enrique Fleischmann prepara una receta de canastillas de pasta filo rellenas de setas variadas, tocineta y huevos. Para acompañar, espárragos, zanahoria y jamón con reducción de vinagre.
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Ingredientes (2 personas)
- 200 g de setas variadas
- 2 láminas de pasta philo
- 2 lonchas de jamón serrano
- 2 lonchas de tocineta
- 1 zanahoria
- 2 espárragos blancos
- 4 ajos tiernos
- 3 huevos
- 30 g de mantequilla
- 50 g de azúcar
- 150 ml de nata líquida
- 100 ml de vinagre de Módena
- agua
- aceite de oliva
- sal
- pimienta
- semillas de amapola
- perejil picado
Elaboración de la receta de Canastillas de setas:
Funde la mantequilla en el microondas. Corta en varios cuadrados cada lámina de pasta philo y úntalos con la mantequilla. Coloca dos moldes redondos sobre una placa con papel de horno y rellénalos con los cuadrados de pasta philo para hacer unas canastillas. Espolvorea las canastillas con semillas de amapola y hornéalas a 180ºC durante 8-12 minutos.
Pica las lonchas de tocineta y los ajos. Trocea las setas. Saltea todo en una sartén con un chorrito de aceite. Reserva.
Casca los huevos en un bol y bátelos. Añade la nata líquida, una pizca de sal, pimienta, un poco de perejil picado y por último las setas con la tocineta y los ajos. Mezcla bien todos los ingredientes, rellena las canastillas y hornéalas a 180ºC durante 15 minutos.
Pela los espárragos y la zanahoria, córtalos en bastones y cuécelos en un cazo con agua. Cuela y reserva. Corta en tiras las lonchas de jamón y dóralas en una sartén con un poco de aceite. Añade las verduras cocidas, saltéalas brevemente y reserva.
Mezcla en un cazo el vinagre con el azúcar y cocina hasta que reduzca y espese un poco.
Sirve las canastillas de setas acompañadas de las verduras con jamón. Salsea con la reducción de vinagre.
Consejo:
Boletus edulis es uno de los hongos más buscados por los gourmets y tiene la propiedad de no variar de color al ser cortado. Brota en bosques de robles y hayas. Pueden encontrarse ejemplares de tres kilos de peso. Desprovistos del pie y fritos, tras ser rebozados en harina y huevo, resultan exquisitos.
Recibe en tu email ideas y recetas de cocina










';