Estofado de albóndigas de pollo

Elaboración

Cortamos en trocitos la zanahoria, hacemos lo mismo con la cebolla, después picamos el perejil y los ajos. Pelamos y chascamos las patatas. Después, en un procesador de alimentos picamos el pollo y el beicon. En un bol pondremos la carne que acabamos de picar, la mitad de los ajos, perejil, pan rallado, huevo, pimienta y sal.

Amasamos hasta obtener una masa homogénea. Formamos las albóndigas, procurando que todas tengan el mismo tamaño. Cuando tengamos todas las pasamos por harina y las freímos en abundante aceite a fuego medio. Cuando estén doradas las sacamos a un plato sobre papel de cocina y reservamos.

Ponemos una olla a fuego medio y cubrimos el fondo con aceite. Cuando esté caliente agregaremos el resto de los ajos, cocinamos 1 minuto. Después agregamos la cebolla y la cocinamos hasta que esté transparente. Añadimos también la hoja de laurel y la zanahoria, cocinamos todo 4 o 5 minutos.

Añadimos el pimentón y removemos bien para que no se queme. Enseguida añadimos el vino y cocinamos hasta que el alcohol se evapore. Añadimos el tomate triturado y cocinamos a fuego medio hasta que el tomate se cocine y pierda su sabor ácido.

Agregamos la harina, debemos removerla en el sofrito durante unos 2 minutos para cocinarla bien y que no se quede cruda. Después añadimos el caldo de pollo y subimos a fuego vivo para llevar la salsa a ebullición. Una vez que rompa a hervir bajamos a fuego medio bajo, añadimos las albóndigas, los guisantes y la tapamos cocinando todo durante 15 minutos.

En una sartén freímos las patatas y las retiraremos cuando estén ligeramente doradas. Después las agregamos a la olla de las albóndigas y cocinamos 15 minutos más a fuego medio con el guiso tapado.