Con una variedad de deliciosas salsas para elegir, desde la clásica salsa de tomate hasta un delicioso pesto casero, esta receta de ñoquis sin gluten es la opción perfecta para cualquier cena.
Gnocchi sin gluten
Ingredientes
- 500-600 gr. patatas
- 150 gr. harina común sin gluten
- 1 huevo
- sal al gusto
- pimienta negra molida (opcional)
- ajo deshidratado (opcional)
Elaboración
Paso 1: Pon 500-600 gramos de patatas en total -dos patatas grandes o tres medianas- en una olla con agua. Ponlas al fuego después de añadir un poco de sal. Déjalas cocer durante 25 minutos después de que el agua rompa a hervir. Cuando al cabo de 25 minutos se pinchen con un tenedor y se noten blandas y se desprendan solas, es que están preparadas. Pela las patatas, desmenúzalas un poco y vuelve a ponerlas en la cacerola, con cuidado de no quemarte.Paso 2: También puede colocar las patatas en un recipiente que te facilite aplastarlas más tarde.
Aplástalas una vez que estén todas peladas y cortadas en rodajas. Puedes utilizar un tenedor o un pasapurés, lo que te resulte más práctico, aunque yo prefiero utilizar un pasapurés.
Paso 3: Una vez bien machacados, añadir la harina junto con un poco de sal, pimienta negra recién molida y ajo seco. Estos condimentos son opcionales, según las preferencias personales, pero a mí me gusta utilizarlos porque dan más sabor a los ñoquis. Ahora añade un huevo entero y mézclalo todo primero con una cuchara y luego con las manos limpias.
Paso 4: Deja reposar la masa de cinco a diez minutos porque está muy pegajosa. Notarás que ahora se maneja mucho mejor. Pasamos la masa a la encimera después de espolvorear la encimera con harina de arroz y enharinarnos las manos. Espolvoreamos ligeramente la superficie con harina, no demasiada, y luego amasamos para crear un rollo. A continuación, dividimos el rollo en rollitos finos del tamaño aproximado de un dedo meñique.
Paso 5: Con la ayuda de una pala de cocina, partimos estos rollos en trozos diminutos, aproximadamente del tamaño de dos centímetros, y los disponemos sobre la encimera enharinada, teniendo cuidado de separarlos para que no se peguen entre sí ni se deformen.
Podemos optar por embellecerlos con las pequeñas ralladuras características de los ñoquis antes de cocinarlos. Para ello, basta con presionar ligeramente con un tenedor antes de arrastrarlo suavemente hacia fuera.
Paso 6: Pon a hervir la pasta en una cazuela con agua y un poco de sal y, mientras hierve el agua, unta una fuente con un poco de aceite. Cuando el agua empieza a hervir, dale unas pequeñas vueltas con una espátula y añade poco a poco los ñoquis. Se hundirán en el fondo de la olla, pero al cabo de un minuto, flotarán hasta la superficie. Estarán listos en cuanto suban, momento en el que podrás retirarlos y añadir unos cuantos más.
Paso 7: Colócalos sobre la fuente y unta un poco más de aceite entre cada capa para evitar que se peguen unos a otros.
Después de hervirlos todos, puedes combinarlos con tu salsa favorita; yo recomiendo la salsa pesto.