Tarta de leche condensada sin horno

Elaboración

Preparación de la base de la tarta:
En primer lugar trituraremos las galletas bien a máquina. Yo he utilizado una picadora, pero se puede hacer a mano. Para ello pondremos las galletas en una bolsa y con un rodillo de extender masa podemos golpearlas hasta triturarlas.

Derretiremos la mantequilla en el microondas o en el fuego. Una vez derretida la mezclaremos con las galletas trituradas hasta hacer una masa compacta. Forramos un molde con papel vegetal y haremos una capa de galleta en la parte de abajo. Tenemos que chafarlas con una cuchara. Luego lo meteremos en la nevera mientras preparamos el relleno.

Preparación del relleno:
En primer lugar, ponemos en un cazo la leche, la nata, la leche condensada y el queso mascarpone. Removemos hasta su completa disolución. Apartaremos un poco de leche fría para disolver la cuajada.

Por otra parte, cuando la mezcla de leche y queso esté disuelta añadiremos la cuajada disuelta en leche y mezclaremos bien. Pondremos al fuego hasta que empiece a hervir. Añadiremos este relleno al molde de la tarta que teníamos en la nevera. Dejamos que enfríe y una vez frío metemos la tarta en la nevera. Dejaremos enfriar toda la noche en la nevera.

Preparación de la decoración:
Yo he utilizado dulce de leche. Para ello he calentado un poco de dulce de leche al baño maría de manera que fuera más fluido. He rellenado un biberón y luego he dibujado por encima de la tarta con el dulce de leche. Podéis utilizar lo que más os guste: chocolate, mermelada, sirope, etc.