Ahora que llega el calor, las preparaciones frescas son las que más apetecen. Una tarta casera fría puede ser el broche de oro ideal para finalizar los menús diarios, o un gran banquete. Con esta tarta de yogur, queso y chocolate quedarás de lujo ante tus comensales, es una receta dulce, sencilla y recomendable 100%.
Tarta de yogur griego y queso con chocolate (sin horno)
Ingredientes
- 2 yogures griegos naturales
- 300 gr. de queso crema
- 180 gr. de chocolate para fundir (especial postres)
- 100 gr. de leche condensada
- 200 ml. de nata para montar (crema de leche)
- 6 láminas de gelatina
- 140 gr. de obleas de pan de ángel
- 100 gr. de mantequilla
Elaboración
Forrar un molde, de 20 centímetros, con papel vegetal. Hidratar las hojas de gelatina en agua fría durante 8 o 10'. Fundir la mantequilla y triturar las obleas. Mezclar bien y repartir la preparación por toda la base del molde.Presionar para compactar y reservar en el frigorífico. Poner en un bol 100ml de nata, los yogures, la leche condensada y el queso crema. Batir con varillas hasta lograr una mezcla uniforme.
Calentar los 100ml de nata restantes. Añadir la gelatina escurrida y remover hasta su completa disolución. Agregar a la preparación anterior y remover para integrarla.
Fundir el chocolate troceado, en microondas o al baño María, y dejar atemperar. Incorporar la mitad a la tarta, dar un par de vueltas para mezclarlo levemente y crear un efecto marmolado.
Volcar el preparado sobre la base de obleas y repartir por toda la superficie la otra mitad de chocolate fundido. Removerlo con la punta de una brocheta, o palillo, para decorar.
Refrigerar hasta que cuaje por completo, 5 o 6 horas (mejor de un día para el otro). Desmoldar y servir.