Tostadas francesas

Si estás buscando una opción deliciosa para el desayuno, las tostadas francesas son una excelente elección. Este plato clásico de la cocina francesa se ha ganado el corazón de los amantes de los desayunos en todo el mundo. Consiste en rebanadas de pan blanco remojadas en una mezcla de huevo batido, leche y luego doradas en una sartén con mantequilla hasta que quedan crujientes y doradas. Una vez listas, se pueden disfrutar con una variedad de toppings, desde sirope de arce hasta frutas frescas. ¡Yo te traigo dos versiones irresistibles! ¿Con cuál te quedas tu?

Ingredientes

Para las tostadas dulces: 

  • 8 rebanadas de pan de molde 
  • 2 huevos talla M 
  • 175 ml. de leche 
  • 1/4 de cucharada de canela en polvo 
  • miel (opcional) 
  • fresas o frutos rojos (opcional) 
  • mantequilla

Para las tostadas saladas: 

  • 8 rebanadas de pan de molde 
  • 2 huevos talla M 
  • 175 ml. de leche 
  • 1 gota de extracto de vainilla 
  • 4 lonchas de jamón cocido 
  • 4 lonchas de queso (gouda o edam) 
  • mantequilla

Elaboración

Comenzamos preparando las tostadas francesas batiendo los huevos con un poco de leche, hasta que ambos ingredientes estén bien integrados. A continuación, agregamos el resto de la leche y continuamos batiendo hasta unir todos los ingredientes. Luego, añadimos canela en polvo si queremos la versión dulce, o extracto de vainilla si preferimos la salada, y batimos unos segundos más.

A continuación, sumergimos las rebanadas de pan de molde en la mezcla por ambos lados, asegurándonos de que se empapen bien, pero sin que lleguen a romperse. Mientras tanto, ponemos una sartén a fuego medio-alto y añadimos un poco de mantequilla. Cocinamos las tostadas por ambos lados, hasta que estén doradas y crujientes, y las retiramos al plato donde las vayamos a servir. A medida que vayamos haciendo más tostadas, agregamos un poco más de mantequilla a la sartén, para que queden con un bonito color tostado y mucho más sabrosas.

Si optamos por la versión dulce, podemos añadir un toque de miel y algunas fresas o frutos rojos para decorar. También podemos experimentar con otras frutas y salsas, como el jarabe de arce o la salsa de caramelo.

Por otro lado, si preferimos la versión salada, colocamos una de las tostadas francesas en una sartén a fuego bajo y sobre ella añadimos una loncha de jamón cocido y otra de queso, como gouda o edam. Luego, cubrimos con otra tostada y cocinamos durante un par de minutos por cada lado, o hasta que el queso se derrita y el jamón esté caliente. También podemos añadir algunos ingredientes adicionales, como tomate, aguacate o incluso huevo frito, para crear una versión aún más completa y sabrosa.

En resumen, las tostadas francesas son una opción deliciosa y versátil para el desayuno o brunch, que podemos personalizar según nuestros gustos y preferencias. Con un poco de creatividad, podemos crear una gran variedad de combinaciones dulces o saladas, y disfrutar de una comida deliciosa y satisfactoria en cualquier momento del día.