Tronco o pionono ¡fácil y sin horno!

Sin duda un postre para disfrutar y para triunfar. Queda tierno, esponjoso, jugoso y el plátano lo hace aún más irresistible. Os lo recomiendo porque además se hace en pocos minutos y así tendremos tiempo para nosotros, estupendo como postre o incluso para servirlo como pastel de cumpleaños. ¡No me digáis que no os apetece!

Ingredientes

  • bizcochitos secos de huevo o bizcochos de soletilla (Savoiardi, ladyfingers, melindros, etc.) 
  • 2 plátanos o bananas (maduros) 
  • 500 ml. (2 tazas) de nata para montar o crema de leche para batir 
  • 40 gr. (4 cucharadas) de azúcar glas o azúcar impalpable (azúcar flor) 
  • 15 gr. (3 cucharadas) de cacao puro en polvo 
  • 250 ml. (1 taza) de leche para mojar los bizcochitos (aprox.) 
  • fideos de chocolate para decorar (opcional)

Elaboración

1 Preparamos una bandeja plana donde colocaremos un par de trozos de papel film, mojamos los bizcochos uno a uno en la leche fría y los vamos colocando en fila sobre el papel film, cuando tengamos una fila hecha ponemos atravesada otra fila y después hacemos otra igual que la del principio al otro lado, cubrimos los bizcochos con papel film y los reservamos en la nevera para más adelante o unos 15 minutos.

2 Batimos la nata muy fría con varillas eléctricas hasta que tenga un poco de consistencia, seguido incorporamos el azúcar glas y el cacao en polvo, mezclamos un poco y seguimos batiendo hasta que este firme y se formen surcos muy profundos en la superficie.

3 Extendemos una capa de trufa sobre los bizcochitos dejándola lisa y pareja, colocamos en el centro los plátanos cortado en trozos para que no queden curvados.

4 Enrollamos ayunándonos del papel film apretando un poco para que quede bien formado, dejamos envuelto en el papel film y lo dejamos en la nevera unos 60 minutos, también reservamos en la nevera la trufa que nos queda.

5 Pasado el tiempo de reposo desenvolvemos el pastel del papel film y le cortamos los dos extremos para que queden a la vista, lo colocamos en la bandeja de servir, cubrimos por encima con la trufa que nos quedaba dejando los extremos sin cubrir, lo podemos dejar así o podemos decorarlo por fuera cubriéndolo de fideos de chocolate.

¡Probadlo os va a encantar!

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