Dormitorio iluminado y fresco en azul

Nuestra invitada de esta semana quiere convertir su trastero en un bonito y relajado dormitorio para alojar a un familiar y conseguir levantarle el ánimo. Con un objetivo así, ¡la alegría y el sosiego no pueden faltar en esta redecoración!

Las paredes de esta estancia estaban envejecidas y algo sucias debido a la humedad, el mobiliario que nos encontramos estaba bastante anticuado y el suelo muy deteriorado.

En este cambio hemos empleado mayormente tonos blancos y azules, dándole a la estancia un toque fresco y limpio y creando una atmósfera relajada y agradable.

Hemos comenzado pintando las paredes y el armario con dos tonos diferentes de azul que van en armonía entre sí.

Después, hemos cubierto el suelo deteriorado con una tarima ha quedado impecable.

Para la cama hemos creado un cabecero con efecto marinero envejecido. Con tres lamas anchas de pino hemos creado el contorno. El interior lo hemos cubierto con lamas de PVC machi-hembradas.

Cuando partimos de una estancia pequeña, añadir un elemento especial, como este cabecero, que resalte frente a la decoración general es una idea que nos chifla.

Para completar la cama, la hemos vestido con los mismos colores del cabecero.

También hemos aprovechado la cómoda. Aunque nuestra anfitriona tenía intención de deshacerse de ella, la hemos pintado y convertido en una preciosa cómoda vintage.

Finalmente hemos colocado unos pequeños estores enrollables de tejido opaco en las ventanas que no tenían persiana, y así poder regular la luz.

👉 Reformado por: 860 euros

Cómo decorar un dormitorio iluminado y fresco en azul

Antes
Convertimos un viejo trastero en un dormitorio iluminado y fresco con una atmósfera muy relajada.

Paso 1
Pintamos las paredes de color azul claro. Comenzamos recortando con la paletina y seguimos pintando la pared con el rodillo. Para este cambio hemos eliminado los zócalos.

Paso 2
Pintamos el armario empotrado. Lijamos la superficie y pintamos con paletina y rodillo de un color azul que crea armonía con el color de la pared.

Paso 3
Comenzamos con el suelo, como está bastante deteriorado, vamos a colocar un aislante y sobre él, unas lamas nuevas.

Paso 4
A la altura de los zócalos colocaremos unas cuñas para que el suelo quede bien orientado.

Paso 5
Empezamos a elaborar el cabecero. Para ello, cortamos unos listones.

Paso 6
Lijamos y pintamos los listones.

Paso 7
Para montar el cabecero, le damos la vuelta en forma de "U" y comprobamos que los laterales estén alineados correctamente.

Paso 8
Colocamos las lamas machihembradas boca abajo, pegándolas con adhesivo.

Paso 9
Seguimos redecorando y reciclando la cómoda vintage. Para ello lijamos y pintamos de rojo y blanco.

Paso 10
Colocamos los estores opacos para poder regular la luz de la estancia.

Paso 11
Vestimos la cama, colocamos los últimos detalles y ¡listo!

¡Reto cumplido! Ya tenemos una habitación iluminada y fresca perfecta para la invitada de nuestra anfitriona.