Dormitorio con zona de juegos

Decorar el dormitorio de un niño puede convertirse en una actividad divertida en la que desarrollemos toda nuestra imaginación, y lo que es más importante, conseguiremos que el niño se sienta cómodo para jugar o descansar en él.

Desde Decogarden os enseñamos cómo con un poco de maña y mucha imaginación podemos crear la estancia ideal para nuestro hijo, transformándolo en un espacio con libertad de movimiento y lleno de actividades.

Paso a paso para decorar un dormitorio con zona de juegos

Paso 1
Transformaremos una estancia con poco colorido en un dormitorio infantil con zona de juegos: pintaremos las vigas y las paredes con alegres colores; instalaremos unas camas abatibles; y crearemos una original y económica alfombra.

Paso 2
Antes de comenzar a pintar aplicaremos a las oscuras vigas una mano de imprimación con una brocha, una pintura preparatoria ideal para superficies difíciles que nos servirá para garantizar un contacto perfecto con la pintura definitiva.

Paso 3
Una vez seca la imprimación comenzaremos a pintar de esmalte acrílico verde las vigas con una brocha, y aprovecharemos el esmalte para pintar también el techo del mismo color. Además, las paredes del dormitorio las pintaremos de dos tonos diferentes: turquesa natural e intermedio.

Paso 4
El siguiente paso consistirá en instalar unas camas plegables en una de las paredes: para colocar las columnas marcaremos con la ayuda de un nivel láser los puntos para realizar unos agujeros con el taladro, colocaremos los tacos en los orificios, presentaremos la pieza y la fijaremos con unos tirafondos. Después, presentaremos la cama, colocaremos los tubos y con una llave allen terminaremos de fijar la cama.

Paso 5
En la parte inferior de la cama montaremos una pizarra adhesiva para que los niños puedan realizar sus propios murales: la fijaremos quitando el plástico protector con la ayuda de una espátula de fieltro para que no aparezcan burbujas de aire.

Paso 6
El frío suelo de cerámica lo revestiremos con moqueta ferial: utilizaremos dos piezas de moqueta como alfombra, y con moquetas de diferentes colores recortaremos círculos con una cuchilla, les colocaremos cinta de doble cara y los pegaremos a la alfombra.

Paso 7
Terminaremos de convertir el dormitorio en una zona recreativa colocando unos alegres pufs, una cómoda y práctica mecedora, varios elementos colgantes, y unas colchas de patchwork en tonos pasteles que reforzarán el efecto pueril de la estancia.