En Decogarden decoramos un porche surfero en color verde cerrándolo con ventanales para crear un espacio más acogedor y aprovechable todo el año.
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Decorar exterior
En Decogarden decoramos un porche surfero en color verde cerrándolo con ventanales para crear un espacio más acogedor y aprovechable todo el año.
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La decoración debe adecuarse a los gustos y necesidades de cada uno. En este caso, Aitor deseaba que este espacio fuera un avance de la cocina, y al mismo tiempo quería transformarlo en un lugar más ordenado y adecuado al frío y húmedo clima.
Para comenzar, hemos vestido las paredes. Los colores naturales son adecuados para este tipo de estancias, por eso hemos elegido un verde suave y calmado, y lo hemos combinado con este mural, creado con madera.
Para darle un toque especial, hemos pintado un rectángulo que permite diferentes interpretaciones. Nosotros lo relacionamos una ventana, un mar calmado o el horizonte. Bajo el revestimiento, hemos recolocado la mesa y el banco de madera, que lijados y pintados, han quedado integrados en este rincón.
Hemos transformado una tabla de surf que ya no se utilizaba. La hemos pintado, le hemos hecho unos agujeros para pasar el cableado de las lámparas y la hemos sujetado al tronco de madera colocado en el techo, que hace la función de soporte. Sin duda, ha quedado de lo más original, rematando la zona de comedor como un lugar de ambiente relajado, playero y surfero.
Empleando unos tableros de contrachapado de okume, en el otro lado del porche, hemos construido unos armarios para guardar todo tipo de material, incluyendo las tablas y los neoprenos de surf.
La baldosa del suelo era resistente pero resultaba muy fría… por eso la hemos cubierto con unas lamas hidrófugas que imitan la madera, tan decorativas como funcionales.
Para completar la decoración hemos cerrado el porche con unos amplios ventanales. De esta manera, la estancia queda aprovechable durante todo el año. Y para los días más fríos, no podía faltar una hermosa estufa de leña, con su respectivo baúl para almacenar la madera ordenadamente.
👉 Reformado por: 1.235 euros
Antes
Vamos a decorar un porche abierto sin ventanas de 19,50 m2 con suelo de baldosa y mesa de comedor. Lo cerraremos con ventanales para crear un espacio más acogedor y poder usarlo todo el año.
Paso 1
Vamos a pintar las paredes con pintura plástica de color verde suave, aplicando con brocha en esquinas y rodillo en toda la superficie. El suelo no es necesario protegerlo porque lo vamos a renovar con parqué.
Paso 2
Protegeremos el suelo con una manta aislante cortada a medida y colocaremos encima un parqué flotante hidrófugo.
Paso 3
El panel de cañas lo revestiremos con tablas de madera de pino que fijaremos a la pared aplicando adhesivo de montaje y cinta de doble cara.
Paso 4
Una vez fijadas las tablas las pintaremos con pintura plástica en azul.
Paso 5
Vamos a renovar una antigua tabla de surf para crear una original lámpara de techo para la zona del comedor. Para ello, lijaremos la superficie con una lija d emano y quitaremos el polvo con un trapo. Aplicamos esmalte sintético en color gris oscuro y dejamos secar. Lo mismo haremos con el banco de la zona del comedor, lijar y pintar en gris oscuro.
Paso 6
Como base de la lámpara fijaremos en el techo una gran rama con unos tirafondos, unos tacos y taladro-atornillador..
Paso 7
Haremos dos agujeros en la tabla de surf para pasar los portalámparas, en este caso, dos cuerdas gruesas de nudos que uniremos a la rama de forma que cuelga la tabla-lámpara.
Paso 8
Hemos cerrado el porche con unos ventanales a los que colocaremos unos estores blancos para tamizar la luz y tener más intimidad en el porche de entrada.
Paso 9
Para los días más fríos, no podía faltar una hermosa estufa de leña, con su respectivo baúl para almacenar la madera ordenadamente. Así hemos creado un porche acogedor con zona de comedor iluminada por nuestra original lámpara surfera.
¡Reto conseguido! Hemos decorado un porche surfero en color verde más práctico y acogedor.