Vemos cómo transformar un salón comedor intranquilo en una sala de estar relajante y acogedora siguiendo la filosofía del feng shui.
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Hogarmania, 26 de abril de 2017
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Vemos cómo transformar un salón comedor intranquilo en una sala de estar relajante y acogedora siguiendo la filosofía del feng shui.
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Hogarmania, 26 de abril de 2017
Si las dos estancias salón-comedor están muy juntas y pegadas lo primero que hay que hacer es separarlas. Podemos usar para ello un biombo ligero para crear una estancia recogida y más limitada que nos proporcione una siesta más tranquila y relajada.
Con el biombo de separación conseguiremos en la siesta dos efectos:
Para relajarse y dormir tranquilamente la siesta en la sala fíjate en que no haya exceso de energía yang que dificulte tu sueño.
Cuando te tumbas en el sofá lo primero que ves no debe ser el televisor porque tiene mucho color, brillo y movimiento (yang). Es mejor centrar la visión en la música con discos y música relajante.
A la hora de elegir la tonalidad de las paredes es mejor decantarse por un color sereno y mate. Por ejemplo, un azul suave relaja la cabeza mucho más que un verde intenso que podría rebajarse también con paredes rugosas.
Las baldas emiten una energía demasiado rápida que dificulta el descanso, por eso es mejor poner armarios con puertas cerradas o tapar las baldas con cortinas.
Abajo lo pesado y arriba lo ligero. Coloca los objetos más pesados en las baldas inferiores. El peso abajo da estabilidad y arriba los objetos de cristal y vidrio dan ligereza. Las baldas superiores deben ser ligeras sin sensación de pesadez para que no transmitan agobio.
Paredes desnudas mejor que sobrecargadas. Los espacios vacíos nos van a dar sensación de relax. Quita todos los cuadros, pinturas y fotografías tristes o que inviten a la soledad.
Coloca en tu salón luz de ambiente para relajarte y estar ligeramente en penumbra en el momento de la siesta o cuando escuchemos música. La sala de estar debe tener luz natural (ventana), luz general y luz de ambiente.
El sofá debe ser blando y cómodo pero debe estar bien ubicado. Si tiene ventanas al lado, baja las persianas y pon cortinas.
En el sofá debe haber mantas (una más ligera y otra más gordita) y cojines mullidos para cambiar de textura. Cuando estamos tumbados y tenemos calor viene bien para refrescar un cojín fresco y al revés cuando tenemos frío un cojín más rugoso.