Las compras online pueden resultar muy cómodas hasta el momento de hacer una devolución. Desde Legalitas nos explican cuáles son nuestros derechos y a quién acudir.
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Hogarmania, 11 de marzo de 2019
Economía
Las compras online pueden resultar muy cómodas hasta el momento de hacer una devolución. Desde Legalitas nos explican cuáles son nuestros derechos y a quién acudir.
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Hogarmania, 11 de marzo de 2019
En los últimos años, las compras online han aumentado considerablemente debido a la facilidad y comodidad que ofrece este servicio. Sin embargo, en algunas ocasiones, cuando el cliente quiere llevar a cabo su derecho de desistimiento la empresa, donde ha adquirido el producto, comienza a ponerle trabas para llevar a cabo la devolución.
Para que esta situación no se produzca, lo primero que hay que saber son los derechos que tienen los consumidores:
No obstante, hay una serie de artículos comprados por internet que no se acogen a estos derechos como productos que caducan de manera rápida como los alimentos, objetos personalizados o a medida, artículos precintados por salud o higiene que una vez desprecintados no se pueden devolver y, por último, CDs, videojuegos o software a los cuales se les haya quitado también el precinto. En todos estos casos, solo se podría reclamar si lo adquirido no coincide con lo que se compró o no está en buen estado.
Para llevar a cabo la devolución, se debe conservar toda la documentación que se haya producido con la compra. Hay que recordar que se dispone de una garantía legal de dos años desde la entrega, pudiendo exigir la reparación o sustitución conforme a lo dispuesto en la normativa. Sin embargo, durante los primeros seis meses la garantía es más fuerte ya que se supone que el defecto sería de origen a menos que el vendedor pueda demostrar lo contrario.
La reclamación debe dirigirse contra el vendedor y solo en caso de que fuera imposible cabe dirigirse contra el fabricante. Hay que tener en cuenta que se podrá reclamar por los daños y perjuicios que pueda acreditar en caso de adquirir un producto defectuoso. Además, si la empresa tiene establecimiento permanente en España, el cliente puede dirigir su reclamación a los organismos de consumo, en el caso de estar ubicada en un país de la UE se puede cursar a través del Centro Europeo de Información al Consumidor.
Con respecto a los gastos de envío de la devolución, la empresa puede cobrarlos en caso de desistimiento. Sin embargo, si el cliente se dispone a devolver un producto que su sede no está en ningún país de la Unión Europea, las reclamaciones se harán casi imposible, ya que se deberá analizar en que país se encuentra, ver las leyes que lo rigen y los organismos a los cuales se tiene que reclamar. En definitiva, un proceso largo e infructuoso en muchas ocasiones.
Si le ha quedado alguna duda o necesita ayuda relacionada con las compras online porque ha sufrido una incidencia en la devolución del producto, los abogados de Legálitas, por ser lector de Hogarmanía, estarán encantados de ofrecerle una consulta gratuita llamando al teléfono 91 558 97 64 o dejándonos sus datos en el siguiente enlace.