Muebles de madera
Quizás alguno de nuestros muebles de madera, más que una limpieza a fondo, necesiten una restauración. Si no realizamos la tarea antes de guardarlo es posible que ahora necesite un lijado rápido y una capa de barniz. También podemos aplicar un producto protector decorativo con color especial para madera. Si por el contrario, nuestros muebles están en perfectas condiciones y solo han acumulado polvo, aplicaremos un jabón de pH neutro diluido en agua. Si tenemos manchas que no se quitan, prueba a lijar con una lija suave ¡con mucho cuidado! Para los muebles plegables, puedes aplicar una capa de vaselina en las bisagras para protegerlas.
El principal problema de los muebles metálicos, aunque son muy resistentes, son las manchas de óxido. Para eliminar la erosión provocada por el agua tendremos que realizar una tarea de restauración. Por ejemplo, para restaurar una silla de hierro primero la limpiaremos a fondo, después la lijaremos y por último le aplicaremos una capa de pintura. Es importante proteger los muebles metálicos con productos antioxidantes, para prevenir las manchas. Si los muebles son de aluminio, con un poco de agua jabonosa será suficiente para su limpieza.
Muebles de resina
Para que los muebles de resina, tanto de interior como de exterior, estén como nuevos es preciso realizar un buen trabajo de mantenimiento utilizando los productos adecuados como un limpiador de manchas incrustadas. Lo primero que haremos será extender el producto por la superficie con la ayuda de un paño, y si son muebles grandes los podemos aclarar directamente con la manguera.
Muebles de fibras
El principal problema de estos muebles es la acumulación de polvo en el trenzado. Para eliminarlo, lo más sencillo, utiliza un aspirador. Después puedes frotar con una esponja humedecida con agua y sal. De nuevo, el vinagre será un aliado para eliminar las manchas más resistentes. Por último, seca con un paño de microfibra. Además, les puedes aplicar un barniz incoloro que los proteja de las inclemencias.