Orden
La primera regla en la cocina debe ser: los utensilios que trabajan juntos deben vivir juntos. Cumple esta regla y crea centros de actividad en la cocina que agrupen los utensilios necesarios para las tareas diarias. En este segundo artículo nos centraremos en el centro de cocina, centro de lavar y centro de mezclar.
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Hogarmania, 29 de agosto de 2014
Está situado junto al horno y la cocina (y generalmente el microondas) y es el sitio donde freiremos el pollo, preparamos los guisos y hacemos las galletas y bollos en el horno. Es el lugar de ollas y cacerolas, batidoras y paletas que usamos para preparar, cocinar o asar en el horno los alimentos. Dado que los utensilios de este centro de la cocina son muchos y grandes, hay que buscar los espacios de almacenamiento adecuados. Guarda los moldes encima de la cocina. Algunas cocinas tienen cajones en la parte inferior que son el sitio indicado para las fuentes y bandejas del horno. Coloca las cacerolas en su sitio, en estantes que estén a la vista y sean de fácil acceso.
Las cucharas y paletas son amigas duraderas; guárdalas en el cajón más accesible o ponlas cerca de la cocina. Pon un gancho en la pared o debajo del armario para colgar los guantes del horno, ¡pero no demasiado cerca del calor!
Guarda las rejillas, moldes y bandejas de horno verticalmente en los laterales del armario. Así podrás cogerlos cuando los necesites sin tener que ponerte de puntillas, separar, y dañar el resto de las cosas.
Las hierbas y especias deben estar colocadas adecuadamente en cada estación, pero asegúrate de que están en un lugar fresco, pues si no perderán su sabor.
Podrás preparar lo que quieras si tu cocina organizada incluye un buen centro de mezclar.
El núcleo: mezclar, preparar y elaborar los alimentos. Este centro es donde toman forma las rosquillas y empanadas, los adobos y bollos.
La estrella de este centro es la batidora eléctrica, ocupando un lugar secundario: las básculas de cocina, vasos graduados y coladores.
El centro de mezclar es el más móvil de todos los centro de actividad de la cocina. No es una parte fija, como el fregadero o la cocina, y puede ser dispuesto en cualquier lugar apto para trabajar. Los sitios de almacenaje son los armarios, cajones y encimeras.
La comida ha terminado y es la hora de limpiar y devolver los platos y la vajilla a su sitio. Este centro de actividad debe estar junto al de lavar/cortar ya que ambos comparten la zona del fregadero al utilizar el mismo espacio de lavar los utensilios. El lavavajillas es la segunda brújula de este centro de actividad. El núcleo de este centro es lavar y guardar los platos y la vajilla de una forma que permita a toda la familia ayudar en el trabajo. Procura que los sitios donde se guardan estos objetos sean cajones y armarios prácticos. Un papel que forre las estanterías protege la porcelana y los vasos e impide que se rompan. Asigna a los platos un sitio adecuado para su función. Una "estantería para el desayuno" contendrá los cuencos para los cereales, platos y tazas de desayuno, que tienen que ser accesibles para que los niños preparen la mesa de desayuno cada mañana.
Los platos que se usen pocas veces deben guardarse en una parte inaccesible del armario, mientras que los platos llanos y soperos agradecerán el aire y la luz de la estantería delantera. Guarda los de recipientes de plástico apilados y a mano, ya que te ayudarán a preparar la comida del día siguiente con lo que queda de la velada. Guarda las tapas en bolsas de plástico o en cajones que impidan que se estropeen o que caigan sobre tus pies cuando abras el armario.