Drosera o Rocío del sol

Las droseras viven, por norma general, en suelos con pocos minerales y para complementar su nutrición, atraen a los insectos, los capturan y los ingieren gracias a unas glándulas por las que segregan una sustancia vegetal viscosa. De hecho, son las gotas de esta sustancia viscosa en las hojas las culpables de que se las conozca comúnmente como rocío del sol, ya que imitan al rocío.

La mayoría de las especies que forman la familia de las droseras son plantas perennes, aunque también existen algunas anuales. Debido a la gran cantidad de especies que entran en este grupo, podemos encontrar plantas desde unos pocos centímetros a los más de tres metros de altura, como en el caso de algunas trepadoras.

El cultivo de la drosera

El cultivo de la drosera variará dependiendo de las especies así que nos centraremos en las más comunes en casa, que son las especies subtropicales. Estas especies, entre las que se encuentran lasDrosera capensis, Drosera aliciae,Drosera spatulata o Drosera binata,tienen un crecimiento vegetativo anual bajo condiciones uniformes o semiuniformes y son las más sencillas de cultivar.

Estas plantas requieres una gran cantidad de luz para que sus glándulasmucilaginosas se mantengan en un tono rosado. De hecho, si vemos que pierden color es por la falta de luz. También necesitan una humedad ambiental de entre el 40 y el 70% durante todo el año y unas temperaturas medias de entre 20 y 35ºC, la mínima nunca deberá ser inferior a 10ºC. En cuanto al riego, necesitaremos un sustrato siempre húmedo, pero con un buen drenaje para evitar encharcamientos. El agua no deberá contener cal, por lo que podemos optar por agua filtrada o embotellada para asegurarnos un buen cuidado de nuestras plantas.