Para triunfar con el cactus de Navidad, tras la floración lo colocaremos en un lugar fresco del hogar, reduciendo los riegos y dándole, de esta forma, el reposo que necesita.
Tiene tallos planos compuestos de segmentos con bordes dentados. De cada segmento aparecen nuevos tallos y con el tiempo la planta no puede mantenerse erguida y adquiere un porte colgante, quedando el tallo arqueado.
El cactus de Navidad está emparentado con el cactus de Pascua (Rhipsalidopsis), floreciendo intensamente durante los meses invernales y coincidiendo con la Navidad.
El riego debe ser abundante cuando la planta está creando nuevos segmentos. No hay que dejar que se seque la tierra.
Las flores surgen de los extremos de los tallos en invierno y, aunque el color más habitual es el rosa, también hay variedades de color rojo y blanco.