En esta ocasión vamos a analizar un jardín o parterre de plantas acuáticas que se encuentra detrás de unas magníficas orejas de elefante y de varios pennisetum alopecuroides.
La exuberancia de la oreja de elefante (alocasia) con sus características hojas en tonos verdes.
Hay muchas variedades de oreja de elefante, en este jardín, ha sido plantada una variedad de tono verde fosforito y una flor prácticamente insignificante pero que desprende una fragancia espectacular. A primera y última hora del día esa fragancia embriaga toda la atmósfera y el entorno de este jardín.
La gramínea, pennisetum alopecuroides tiene una característica espiga que en otoño esparce sus semillas. Es importante tener cuidado con el pennisetum ya que puede ser una planta bastante colonizadora.
Jardín de tonos verdes
Estas plantas que acabamos de comentar crean un pasillo por el que nos adentramos en este jardín de distintos matices de verde, distintas texturas, tonalidades, intensidades...
En este espacio, prácticamente no hay flores, ya que el centro de interés son las texturas y matices de las hojas, siempre en tonos verde.
En un primer lugar se puede observar la pontederia cordata, una planta acuática que se caracteriza por tener un tallo bastante largo y una hoja en forma de lanza.
Su flor suele ser de tonos azulados, si bien tiene poco interés, ya que lo que destaca es su hoja con su característico color verde.
Puntualmente, a lo largo de todo el jardín se pueden ver distintos papiros (cyperus papyrus), muy elegantes, con su porte pendular. Destacar su color verde fosoforito, perfecto para hacer contrastes.
Finalmente, destacamos la soberbia hoja de la thalia dealbata. De porte muy elegante con sus hojas lanceoladas. Soberbia a la vez que ligera, y, en el centro, su tallo floral con sus flores en tonos lilas.
Como se puede apreciar, hemos analizado tres plantas con tamaños de hoja distintos y texturas diferentes de verdes, que pueden inspirar una composición floral con el verde como protagonista.