Plantas de hojas grandes

La Dicksonia Antarctica es un helecho arbóreo, proveniente de Australia donde crece en zonas húmedas protegido por la copa de los árboles. Cuando talan los bosques de pinos, cosechan los troncos de las dicksonias y los exportan sin hojas y sin raíces, con una etiqueta que sirve de patente para que no se puedan expoliar. 

El tronco se cultiva en un contenedor con un buen sustrato y de las pequeñas raíces del tronco comienzan a salir las nuevas raíces. De la parte de arriba, de la yema apical, comienza a salir una inmensa corona de hojas. Anualmente va echando una o dos capas de hojas y por tanto va creciendo unos 3-4 cm. al año.

Es un helecho realmente interesante y perfecto para plantar en zonas sombrías y protegidas de los fríos extremos, ya que por debajo de los -3 ºC comenzaría a sufrir considerablemente. Tiene una frondosidad y unas hojas realmente elegantes y si se mantiene en condiciones óptimas, los frondes (hojas de los helechos) pueden llegar a alcanzar los 2 metros de longitud. 

Si colocamos una dicksonia en un patio o jardín sombrío un cubresuelos perfecto sería un helecho no árboreo y resistente como el dryopteris. Estos helechos pierden prácticamente todas sus hojas en invierno, pero vuelven a salir todos los años. Dentro de este grupo hay muchas variedades.

La Gunnera Manicata proviene de Chile y es una planta vivaz muy elegante de hojas gigantes. Al cabo de 5-10 años, cuando llega a la madurez, sus hojas pueden alcanzar 2 m. de diámetro. Necesita mucha humedad en la raíz por lo que normalmente se cultivan junto a estanques. También necesita tierras muy orgánicas y ricas en nutrientes, por lo que hay que aportarle una buena cantidad de estiércol. Cuando llega el invierno las hojas empiezan a marchitarse hasta que desaparecen. En esta época es necesario tapar el cogollo central para protegerlo de las heladas. 

Otras plantas con hojas de gran tamaño son la Bananera (Musa x paradisiaca) y la Costilla de Adán (Monstera deliciosa), ambas muy llamativas y elegantes.