Composición de kumquat y petunias

El kumquat es un cítrico con forma de limón y color naranja. Algunas de las características principales del kumquat es que se comen enteros, su piel es dulce y el interior amargo.

Este tipo de cítricos es perfecto para tener en casa debido a su pequeño tamaño.

Podríamos plantar nuestro kumquat en una maceta de plástico, pero como lo pondremos hacia el sol elegiremos una tiesto de barro que mantendrá el agua y la tierra de su interior a temperatura ambiente.

Además, podemos elegir la surfinia para combinarla con el kumquat y crear una preciosa composición: la surfinia es una petunia de corte elegante, ideal para balcones y terrazas. Una planta muy aconsejable para la temporada de verano.

Existen distintas variedades y en distintos colores. La surfinia de tonos violetas es de las más floríferas y muy resistente. Sin embargo, para esta composición vamos a optar por la surfinia de flor blanca y que combinará a la perfección con la flor del kumquat.

Para el trasplante, lo primero es aportar una capa de gravilla volcánica para el drenaje. Es muy importante el drenaje para evitar que el agua se estanque ya que puede afectar a las raíces de la planta.

A continuación aportamos un sustrato de calidad. Este sustrato incorpora perlita que hace que el sustrato este más suelto y aireado.

Antes de proceder a plantar nuestro kumquat incorpora a la tierra un abono específico para cítricos.

Trasplantamos el kumquat introduciéndolo en el contenedor, planta las petunias al rededor del árbol y termina de cubrir con más sustrato.

A la hora del mantenimiento, es importante que la tierra esté húmeda y no empapada. A la hora de abonar tenemos que fertilizarla en verano cada dos semanas.

Es mejor orientar la maceta al sur en posición soleada. De esta forma podremos alegrar y decorar nuestra terraza y balcón.