Problemas de salud de reptiles por mal cuidado

Los reptiles son animales que se han puesto de moda como mascotas pero que si no se conocen bien, pueden dar muchos problemas. Lo que puede ser un capricho al principio, puede llegar a convertirse en un problema. Las tortuguitas, iguanas y serpientes crecen y sus dueños se cansan y las abandonan de manera irresponsable. Piénsatelo bien antes de adquirir un reptil como mascota y si lo haces, cuídalo hasta el final.

Los reptiles son de origen lejano, como el Dragón Barbudo propio de Australia, por eso, es muy importante reproducir su hábitat natural y buscar lo más parecido a la naturaleza. Si se va a adquirir un reptil como mascota, lo primero que hay que hacer es informarse sobre qué tipo de reptil es para adecuar las condiciones del terrario a esa especie, como la temperatura, luz y humedad.

Las iguanas, por ejemplo, son animales de sangre fría que necesitan calor y hay que ponerles rocas de calor y filtros de luz ultravioleta. Ten cuidado con las mantas eléctricas o aparatos para dar calor radiante desde abajo porque suelen producirles quemaduras.

Si se tienen más ejemplares en casa hay que mantener al nuevo ejemplar en cuarentena, nunca meterlo desde el primer día con los demás porque sufre estrés. Para evitar problemas de convivencia, debes tener en cuenta que si son dos machos de la misma especie, competirán por la misma comida así que no les juntes.

Además, podrían brotar enfermedades que hubiesen estado incubando en la tienda. Conviene llevarle al veterinario para examinar con exactitud su estado de salud antes de asentarlo en casa. Si se muere el animal, hay que evitar sustituirla inmediatamente por otro ejemplar, ya que podría haber muerto por una enfermedad infecciosa y en su terrario seguiría estando dicha enfermedad. Se debería desinfectar o tirarlo y habilitar otro lugar diferente.