Dieta sana
La berenjena posee en su composición un elevado porcentaje de agua, mientras que su contenido en glúcidos, proteínas y lípidos es muy bajo.
Carece de fibra, excepto una pequeña cantidad en la piel y las semillas. Por todo ello, su valor calórico es muy escaso, por lo que se la puede incluir perfectamente en dietas de adelgazamiento. Sin embargo, hay que tener en cuenta que cuando se fríe absorbe mucho aceite aumentando su valor calórico.
Valores nutricionales
- Su contenido en agua es realmente alto, un 90%. Además tiene pocas grasas y proteínas.
- Entre las vitaminas podemos destacar las del tipo E, A, C, B1, B2.
- Los minerales que más destacan son el hierro, magnesio, calcio, fósforo y potasio.
- Es un alimento indispensable para los diabéticos, ya que sacia sin aportar prácticamente hidratos de carbono.
- También se le atribuyen propiedades diuréticas, laxantes y relajantes.
- La berenjena cruda contiene tomatina, una sustancia que puede provocar dolores de cabeza y alteraciones gastrointestinales. Por eso se recomienda consumirla siempre madura y cocinada.
- Cocida y pelada es muy digestible, apropiada para las personas que presentan padecimientos estomacales e intestinales.
- Cocinada con muy poca grasa, beneficia a personas afectadas con artritis y gota.
Por 100 gramos de porción comestible (na = no analizado):
Energía (kcal) - 16,56
Proteínas (g) - 1,24
Grasa (g) - 0,18
Hidratos de carbono (g) - 2,66
Colesterol (mg) - na
Fibra (g) - 1,37