Dificultad para respirar, taquicardia, miedo a perder el control y mareos son algunos de los síntomas a través de los que se manifiesta el ataque de pánico. ¿Habías escuchado antes hablar de este tipo de episodios?
Te contamos qué es un ataque de pánico, cuáles son las causas de su aparición, los síntomas con los que se manifiesta, prevención y tratamientos. ¿Te lo vas a perder?
¿Qué es un ataque de pánico?
Un ataque de pánico es, tal y como lo definen los especialistas, un episodio repentino de miedo o ansiedad que provoca reacciones físicas como taquicardia y dificultad para respirar, entre otros.
Y es que el pánico es, tal y como lo define la Real Academia Española, popularmente conocida como la RAE: "Dicho del miedo o del terror: Extremado o muy intenso, y que a menudo es colectivo y contagio".
El ataque de pánico es, dicho de otra forma, un pico muy fuerte de ansiedad con síntomas como taquicardia, falta de aire y tensión muscular en todo el cuerpo acompañados de una enorme sensación de miedo.
Un episodio corto, pero muy intenso, al que también se le denomina crisis, que no tiene por qué darse en un momento de ansiedad.
Se trata de una respuesta natural del cuerpo que, según señalan los especialistas, es más común en mujeres que en hombres. Es más, según los expertos, el perfil de las personas que padecen ataques de pánico es de aquella que, a priori, parecen seguras de sí mismas, pero en realidad no lo son. Son personas muy nerviosas y, por lo general, no expresan mucho su malestar ni su ansiedad y son muy perfeccionistas.
Pero, ¿cuáles son las posibles razones que están detrás de un ataque de pánico? ¡Lo vemos!

¿Cuáles son las causas de un ataque de pánico?
Vivir con altos niveles de estrés durante un periodo prolongado de tiempo, tener algún problema de salud o tener un trastorno del estado de ánimo son algunos de los factores que pueden estar detrás de un ataque de pánico. Pero no son los únicos.
A continuación, vemos cuáles son las causas de un ataque de pánico. ¿Te lo vas a perder?
- Tabaco.
- Estrés.
- Predisposición biológica a sufrir este tipo de episodios.
- Trastornos como ansiedad, depresión, trastorno bipolar...
- Ingesta o abstinencia de medicamentos, drogas o alcohol.
Pero, ¿qué síntomas experimenta una persona que está sufriendo un ataque de ansiedad?
¿Cuáles son los síntomas de un ataque de pánico?
- Sensación de miedo intenso.
- Dificultad para respirar y sensación de ahogo.
- Dolor u opresión en el pecho.
- Palpitaciones.
- Sudoración.
- Temblores.
- Nauseas.
- Mareos.
- Escalofríos.
- Sensación de calor.
- Hormigueo.
- Sensación de irrealidad.
- Miedo a perder el control.
- Miedo a morir.
Tal es la intensidad en la que se manifiestan los síntomas en el ataque de ansiedad, que es habitual que, sobre todo en aquello casos en los que este episodio se da por primera vez, la persona en cuestión acuda a urgencias por miedo a que algo grave le esté ocurriendo. Pero, ¿hay alguna manera de prevenir un ataque de pánico?
¿Se puede prevenir un ataque de pánico?
Bien si tienes la sensación de que va a aparecer un ataque de pánico, como si lo estás teniendo, hay algo que puedes hacer para prevenir y/o detenerlo.
Eso sí, cabe destacar que son una serie de recomendaciones enfocadas, principalmente, para aquellas personas en las que no es la primera vez que sufren este tipo de episodios. ¿La razón? Es posible que ya reconozca los síntomas que, posiblemente, empiece a sentir, pues ya los ha experimentado anteriormente.
Algunas de las pautas de los especialistas son:
- Afloja cualquier prenda que pueda dificultar la respiración.
- Respira profundamente.
- Utiliza técnicas de relajación muscular.
- Intenta estar tranquila y relativizar.
- Reduce los estímulos acomodándote, si es posible, en un espacio oscuro y tranquilo.
Ten en cuenta que este tipo de episodio suele durar, aproximadamente, entre 5 y 20 minutos, y volverás a encontrarse bien.
¿Cuál es el tratamiento para un ataque de pánico?
Antes de indicar un tratamiento para (evitar) un ataque de pánico, el profesional especialista evaluará los posibles factores que han podido desencadenar el ataque de pánico. No es hasta que el profesional realiza una evaluación del paciente, cuando indica el tratamiento a seguir.

Cabe destacar que el tratamiento que se indica, principalmente el tratamiento psicológico, está adaptado a las necesidades de cada paciente.
El objetivo de los diferentes tratamientos no es otros que adquirir las herramientas necesarias para gestionar este tipo de situaciones. En la mayoría de los casos, este tipo de situaciones no vuelve a repetirse.
Desde Hogarmania te recomendamos que, para cualquier duda que te surja, no dudes en consultar a tu médico de cabecera o profesional especialista.