¿Qué es meditar y cómo se hace?

Se define meditar como "Pensar con profunda atención en algo". Una técnica de relajación cuyo principal objetivo es reducir los niveles de estrés y mejorar el bienestar emocional.

Se trata de una práctica cuyo origen se remonta a finales del siglo XIX y cuya popularidad ha ido incrementando durante los años como consecuencia de los beneficios que se obtienen de su práctica. Pero, ¿de qué beneficios estamos hablando?

Beneficios de la meditación

• Mejora la capacidad de atención y concentración.
• Reduce el estrés.
• Aumenta el autoconocimiento.
• Afecta de manera positiva al sistema inmunológico.
• Aumenta la productividad y la creatividad.
• Mejora la calidad del sueño.
• Ayuda a tener una actitud optimista y positiva.
• Mejora las relaciones personales.

Tipos de meditación

El término meditación es un concepto genérico que engloba desde el yoga hasta el budismo. Algunas de las técnicas más comunes son:

Meditación Zazen

Consiste en una meditación que se basa en una respiración larga, profunda y suave. Una tipología que se realiza sentado y en el que la atención se focaliza en la posición y la respiración.

Meditación Mantra

Meditar concentrados en la respiración y desconectar de los pensamientos que ocupan nuestra mente a través de cánticos o mantras.

Mindfullness

Un tipo de meditación muy popular que consiste en prestar atención a nuestros pensamientos, sentimientos y comportamientos que están dando lugar en cada momento.

Meditación budista

Se trata de un tipo de meditación muy común que se basa en entrenar la mente para que se enfoque en el presente, en el aquí y el ahora, sin pensar en el futuro.

¿Cómo se hace?

Si bien cuando se empieza a meditar puede resultar una actividad difícil, lo cierto es que con la práctica nos vamos a familiarizar con las diferentes técnicas y a sentirnos cada vez más cómodas.

Aunque dentro de la meditación podemos encontrar diferentes formas de hacerlo, la mayoría de ellas se llevan a cabo en un entorno tranquilo, con una postura cómoda, concentración y una actitud abierta y positiva. Pues allá vamos.

• Ponte ropa cómoda y escoge un lugar tranquilo y acogedor.
• Siéntate en el suelo, puedes hacerlo sobre una esterilla para estar más cómoda, con la espalda recta. Respira hondo y mantén los hombros y los brazos relajados y libres de tensiones.
• Mira al frente y elige un punto en el que fijar tu mirada. Trata de crear pensamientos positivos, visualizarlos y mantenerlos durante unos minutos.
• Concéntrate, cierra los ojos y respira de forma adecuada.
• Trata de aumentar, de manera progresiva, el tiempo diario de meditación. Si empiezas por una sesión de 5 minutos (lo recomendable para aquellos que se están iniciando), lo ideal que la siguiente sesión sea de 10 minutos y así sucesivamente hasta alcanzar los 30 minutos al día.