Se acerca la vuelta al colegio para los más pequeños de la casa. Un año más nuestros hijos vuelven a enfrentarse al comienzo del curso escolar.
Hogarmania, 5 de septiembre de 2017
Niños
Se acerca la vuelta al colegio para los más pequeños de la casa. Un año más nuestros hijos vuelven a enfrentarse al comienzo del curso escolar.
Hogarmania, 5 de septiembre de 2017
Y las dudas emergen: ¿quién será mi tutor/a?; ¿me tocará con mi mejor amig/o?; ¿podré sentarme en mi pupitre preferido?
Todas estas dudas e inseguridades suponen en los niños un periodo de regresión o de vuelta al pasado, de no avance o retroceso. Los síntomas de que está pasando por este momento se escenifican en que se vuelve a chupar el dedo, se muestra más mimoso o se hace pis en la cama.
En periodos de estrés para los niños como puede ser la vuelta al colegio estas demostraciones regresivas son normales y pasajeras. Este tipo de comportamiento es conocido como “regresión del niño” y puede manifestarse también de otras formas: actuar como un bebé; buscar de nuevo la protección de los padres; mimos y celos; enfados y rabietas, etc.
Al igual que sucede cuando tienen un “hermanito” y comienzan los celos pueden producirse otros comportamientos denominados “regresivos” pero que no son importantes y van desapareciendo con el tiempo y la aceptación de la situación: quieren de nuevo el chupete, sacan los juguetes que utilizaban cuando eran más pequeños o te piden que les des la comida en la boca.
Otros motivos por los que se puede producir la “regresión” en los más pequeños de la casa es cuando tienen miedo a crecer y miedo al fracaso entre los 3 y 5 años, presencia “peleas” y discusiones de los padres o se produce la muerte de una persona cercana.
Debemos saber que no tenemos que preocuparnos ni enfadarnos con nuestros hijos ya que este periodo es pasajero y habitual. Olvidemos frases como “ya eres mayor para hacer esas cosas” ya que lo único que podemos conseguir es atacar el autoestima del niño.
No hay que darle importancia a menos que estos síntomas perduren durante meses porque en tal caso deberíamos visitar al pediatra para que evalúe la situación y dictamine si esta regresión tiene como origen la vuelta al colegio o existe otro motivo.