Las frutas son un dulce tesoro, la mejor golosina. Nos ayudan a prevenir y a curar, y estimulan los 5 sentidos por su color, aroma y forma. Al introducir la primera crema de frutas debemos escuchar al bebé. Con una o dos cucharadas para el primer día puede ser suficiente. En un principio, el único alimento que nuestro bebé conoce es la leche tibia. Si mezclamos la fruta con leche quizá sea más agradable para él. Lo probamos y observamos cuál es su reacción.
En la primera etapa del bebé las recetas son simples y llevan pocos ingredientes. Más adelante, iremos añadiendo nuevas frutas y texturas, hasta llegar a frutas más tardías, como el kiwi o las fresas. Para entonces, el niño masticará y disfrutará de una variedad importante de frutas frescas. El objetivo es que el bebé se beneficie de todas las vitaminas y minerales de la fruta, y llegue a consumir 3 piezas al día, siendo una de ellas un cítrico. Debes tener paciencia, cada niño es un mundo y la fruta un gran universo.

Consejos nutricionales sobre las frutas en la alimentación del bebé
- Las frutas peladas aportan agua, azúcar rápido, vitaminas, minerales y fibra.
- El paso de alimentos triturados a enteros debe de ser lento y gradual. Al masticar, la sensación de saciedad llega antes. Una buena opción es presentar una pequeña cantidad de fruta en entero y la otra triturada.Las frutas cocidas enteras acompañadas de yogur, crema de leche o leche vegetal son nutricionalmente más completas para el desayuno o merienda.
- Puesto que el bebé está acostumbrado a tomar leche tibia, es recomendable templar la compota ligeramente. Para enriquecer la crema con proteínas, se cambiará el líquido de cocción por un poco de leche o yogur a la hora de triturar.
- Las mermeladas de frutas son ricas en fibra y azúcares. Se deben consumir con moderación, como un adorno para dar color y dulzor a algún postre o merienda, al yogur natural, el queso fresco, o el helado.
Propiedades de las frutas en la alimentación del bebé
Según la estación se pueden cambiar unas frutas por otras. El plátano,
la manzana y la pera aportan sabores suaves. Los trozos de melocotón,
melón, uva, piña, mango o cerezas, colorido y sabores nuevos.
- La uva, una fruta energética, aporta azúcares (fructosa y glucosa) y es rica en vitaminas y minerales. Además es una fruta de acción laxante y diurética.
- El plátano tiene gran valor nutritivo y energético. Se debe elegir una pieza madura para que sea digestivo.
- El melocotón es rico en vitamina A, beneficiosa para la vista, piel y mucosas. Además aporta hierro.
- La manzana regula el tránsito intestinal y tiene efecto laxante.
- Las naranjas son frutas ácidas, por lo tanto se debe tener cuidado con los primeros zumos, el niño lo puede rechazar por su acidez. Para un resultado más dulce, sustituir el zumo de naranja por zumo de mandarina.
- Es recomendable esperar al menos hasta el año para incorporar el kiwi y la fresa a la dieta del niño. El kiwi, una de las frutas más ricas en vitamina C, ayuda en la regulación del tránsito intestinal.
Consejos de conservación para las compotas de frutas para bebés:
- El envasado al vacío ayuda a mantener todas las propiedades nutricionales y organolépticas dela fruta triturada.Al eliminar el aire, ésta no se oxida con tanta facilidad y no pierde sus propiedades. Es aconsejable guardar la fruta a temperaturas bajas, sobre todo en verano.
- El azúcar se utiliza como conservante,pero en alimentación infantil no es recomendable utilizar una gran cantidad.Envasar al vacío nos permite conservar durante más tiempo con un aporte calórico menor.Una vez envasada, se puede alargar la vida de la mermelada con el congelado.Antes de envasar al vacíose deben enfriar los platos.
* Fuente: Consejos de alimentación de bebés del libro "Mi bebé come sano" de Alfa