Dormir es importante, ya que tanto el cuerpo como el cerebro necesitan descansar y recuperarse del estrés diario. En verano, la calidad del sueño disminuye debido a las elevadas temperaturas. Incluso es habitual que algunas personas sufran el temido insomnio de verano cuando el calos supera los 40-45ºC.
Por ejemplo, ¿sabías que cuánto más calor hace el cerebro genera menos melatonina? La melatonina es la hormona responsable del sueño, es decir, la hormona que nos ayuda a conciliar el sueño. Por eso, el días de olas de calor dormimos peor, especialmente cuando no disponemos de un sistema de climatización adecuado en nuestra vivienda.
No obstante, sí que existen una serie de hábitos y recomendaciones que te ayudarán a refrescar tu casa en verano y, por ende, te servirán para dormir mejor cuando hace mucho calor.
Trucos para dormir bien cuando hace mucho calor
Tomar una ducha antes de dormir, hidratarse a lo largo del día y crear corrientes de aire en la habitación serán clave para conciliar el sueño en los días más calurosos del año.
1. Cierra las persianas de toda la casa
Para dormir bien, la temperatura de la habitación no debe rebasar los 21ºC. ¿Cómo conseguimos esta temperatura o una similar? Atiende bien. Lo más importante para mantener la casa fresca cuando hace mucho calor es bajar las persianas por completo durante todo el día.
Así que, en los días de calor, te aconsejamos que ventiles tu casa casa a primera hora de la mañana, luego bajes las persianas (y las ventanas también) y, solamente las subas hasta la mitad cuando llegue la noche. Es decir, durante el día debes aislar tu casa para impedir que entre el calor del exterior.
Por la noche, las temperaturas caen, por lo que puedes aprovechar este momento para ventilar y renovar el aire del interior de tu vivienda. Aunque, lo mejor de esto es que si abres todas las ventanas, podrás crear corrientes de aire que refrigerarán tu casa.
Presta especial cuidado a tu habitación, ya que es el lugar en donde pasarás de media 8 horas conciliando el sueño.
2. Hidrátate a lo largo del día
Uno de los aspectos más importantes en cualquier época del año, especialmente durante los meses más calurosos del año, es la hidratación.
Así, si nos encontramos con un día muy caloroso, deberemos beber por lo menos 3 litros de agua a lo largo del día para que el cuerpo se mantenga hidratado al llegar la noche.
3. No consumas alimentos muy pesados
Hay que tener en cuenta que hay ciertos alimentos que ayudan a dormir mejor. Los alimentos con pocas grasas y calorías son los más adecuados para conciliar el sueño.
Esto se debe a que las grasas saturadas necesitan mucha agua para su absorción, por lo que es mejor dejarlas de lado en la cena.
Por otra parte, sabías que cenar tarde incrementa los problemas de obesidad y riesgo de diabetes? Por ello, te aconsejamos que lo hagas pronto para que tu cuerpo tenga tiempo de digerir mejor los alimentos.
4. Evita el alcohol y la cafeína antes de dormir
Al igual que hay ciertos alimentos no recomendados para este tipo de situaciones, el alcohol, la cafeína, las bebidas energéticas y azucaradas también pueden influir negativamente en el sueño.
Recordemos que bebidas como el alcohol tienen un efecto deshidratante, por lo que empeoran el sueño en los días de calor. Si reduces la ingesta de este tipo de bebidas, ¡tu cuerpo te lo agradecerá!
De igual forma, procura no beber demasiados líquidos antes de ir a la cama, especialmente para evitar ir al baño con frecuencia.
Por último, si te despiertas a media noche, un poco de agua fresca o del tiempo, te ayudará a volver a conciliar el sueño.
5. Duerme de lado
Puede parecer una tontería, pero la postura también puede influir a la hora de conciliar el sueño. Si optamos por dormir de lado, tendremos menos parte del cuerpo sobre las sábanas, por lo que la sensación de calor será menor.
Hablando de sábanas, te recomendamos cambiarlas dos veces por semana y utilizar aquellas que sean de algodón, ya que transpiran mejor.
6. Utiliza ventiladores en la habitación
Se pueden utilizar ventiladores en el dormitorio para refrescar la estancia. Así todo, es importante no colocarlos directamente enfrente de la persona. Se puede colocar en un lado de la habitación y así refrescará el ambiente, pero a ser posible, es mejor no utilizar el aire acondicionado.
Para evitar un exceso de consumo eléctrico, opta por ventiladores de bajo consumo de bajo consumo y que tengan función de apagado mediante programación.
Aprovechamos este apartado para enseñarte un truco rápido para refrescar una habituación con ventilador: Llena un cuenco con hielo y sitúalo en ángulo frente al ventilador. De esta forma, al encender el aparato notarás como el aire que circula es frio y fresquito. ¡Un tip fantástico para combatir las olas de calor!
7. Ventila la habitación a primera hora de la mañana
Queremos hacer hincapié en este apartado porque la ventilación es fundamental para regular la temperatura de una habitación y para ... ¡evitar los malos olores! No sirve de nada seguir los consejos anteriores si la habitación en la que vamos a dormir no está bien ventilada. Antes de ir a dormir, abre puertas y ventanas para refrescar el ambiente de tu habitación.
Sobre el tiempo de ventilación, bastará con que lo realices de 15 a 30 minutos. Eso sí, procura tener mosquiteras o no encender las luces para evitar atraer a los mosquitos o zancudos.
8. Evita hacer ejercicios antes de dormir
Si realizamos deporte muy intenso antes de dormir, nuestro cuerpo estará más activo. Y esto provocará que sea más complicado dormir, y más si además hace calor. Lo que recomiendan los especialistas es optar por algún ejercicio de relajación como el yoga, el bodybalance o el pilates.
9. Toma una ducha antes de dormir
Una ducha con agua tibia (o caliente) puede ayudarte a conciliar el sueño cuando hace mucho calor. Esto se debe a que nuestro cuerpo tendrá una sensación mayor y más duradera de frescor y será mucho más fácil dormir. Con una ducha de 5 minutos bastará para lograr esa sensación que buscamos.
Y, no olvides hidratar tu cuerpo con una crema corporal hidratante. Este es un truco poco conocido que funciona de maravilla con todos los beneficios que conlleva: hidratar y relajar la piel tras el estrés del día. ¡Haz la prueba!
10. Utiliza ropa de cama elaborada con fibras naturales
La ropa que utilizamos para dormir es un factor muy importante para conciliar un buen sueño cuando hace calor. Te aconsejamos que utilices ropa cómoda de algodón o algodón natural. Puede parecer extraño, pero el algodón ayuda a una correcta absorción de la transpiración y no provocan una sudoración excesiva.
Seguro que con estos sencillos consejos te resulta más fácil conciliar el sueño durante las noches de verano de mucho calor. Además, si a estos consejos le sumamos algún remedio natural con plantas medicinales relajantes, seguro que no tendrás problemas.
