¿Te ha pasado, en alguna ocasión, que durante o después del ejercicio te invade un dolor de cabeza intenso? Si la respuesta es afirmativa, no te alarmes, es algo que ocurre con más frecuencia de la que te puedes imaginar.
Al dolor de cabeza que aparece durante o después del entrenamiento se le denomina, según los profesionales especialistas, dolor de cabeza tipo tensional y se clasifica en dos tipos, por un lado, los primarios, y por otro, lo secundarios. Pero, ¿en qué consiste cada uno de los tipos?
Pues bien, los dolores de cabeza primarios son aquellos que están producidos por esfuerzos, tensiones o falta de sueño. En definitiva, no están relacionados con ningún problema de salud no diagnosticado y tiene, por lo general, una duración aproximada de entre 5 minutos y 2 días.
Mientras, los dolores de cabeza secundarios suelen hacerlo durante, al menos, un día, pudiendo llegar a prolongarse hasta varios días. Estos pueden ser síntoma de cuestiones se más seriedad como la hipertensión, un ictus o una infección. En este segundo caso, es fundamental consultar a un profesional especialista.
¿Qué otros síntomas pueden acompañar al dolor de cabeza?
Aunque el dolor de cabeza es, como su propio nombre indica, el principal síntoma del dolor de cabeza por esfuerzo físico, hay una serie de síntomas que pueden aparecen de forma complementaria, aunque no siempre lo hacen.
Hablamos de náuseas, vómitos, rigidez de cuello, temblores, mareos, visión doble, sensibilidad a los ruidos y a la luz, mareos y, en algunos casos, pérdida de conocimiento.
En cualquier caso, lo recomendable es consultar a un profesional especialista para determinar si hay alguna dolencia detrás de ese dolor de cabeza, o simplemente es el resultado de algunas de las causas que mencionamos a continuación.
¿Por qué duele la cabeza después de hacer ejercicio?
Deshidratación
Una de las causas más comunes de la aparición del dolor de cabeza durante o después del ejercicio es la deshidratación. ¿A quién no le ha pasado de olvidársele la botella de agua en casa o llevarla al gimnasio, pero no darle un trago en toda la sesión de entrenamiento? Este sencillo gesto tiene más importancia de la que crees.
Como ya habrás escuchado en repetidas ocasiones, durante el ejercicio físico, independientemente de la actividad que estemos realizando, nuestro cuerpo pierde agua a través del sudor. Esa agua hay que reponerla, y no es suficiente con beber agua la final del ejercicio.
Hipoglucemia
La glucosa, como sabrás, es la principal fuente de energía para el cuerpo, es decir, es el motor de energía. Los bajos niveles de glucosa, o azúcar, es una de las causas del dolor de cabeza durante o después del ejercicio. ¿La razón? Si la glucosa es la principal fuente de energía y no hay suficiente cantidad de la misma, el cuerpo acusa el sobreesfuerzo y responde de esta manera.
Respirar de manera incorrecta
Respirar correctamente es, para un gran porcentaje de los deportistas, una de las actividades más difícil de hacer. Por mucho que, al principio, lo hacemos correctamente, es decir, inhalamos por la nariz y exhalamos por la boca, en el momento que dejamos de pensar cómo hacerlo, lo hacemos de manera inconsciente e involuntaria, lo que se traduce en el que lo hacemos mal. Esto nos puede provocar dolor de cabeza.
Mala postura
Otra de las razones por las que puede aparecer este incómodo síntoma es la mala postura. Si al realizar el ejercicio no cuidamos la postura, puede causar tensión, dolor en la parte del cuerpo que hemos forzado y en la cabeza.
Entrenamiento excesivo
Por último, el entrenamiento excesivo también puede provocar un dolor de cabeza, además de vómitos o problemas de visión. Según los especialistas, el esfuerzo físico extenuante dilata los vasos sanguíneos que se encuentran en el cráneo, lo que se traduce en un dolor de cabeza punzante.
Consejos para evitar el dolor de cabeza durante o después del ejercicio
- Beber suficiente agua antes, durante y después.
- Evitar entrenar al sol cuando hace calor.
- Cuidar la postura durante la práctica de la actividad física.
- Evitar entrenar con el estómago vacío y después de una comida copiosa.
- Hacer estiramientos antes y después del ejercicio.
- Ajusta el entrenamiento a tu estado físico, evita sobreesfuerzos.
Desde Hogarmania te recomendamos que, para cualquier duda que te surja, no dudes en consultar a tu médico de cabecera o profesional especialista.