Prevenir y tratar los problemas relacionados con la circulación de la sangre de las piernas. Así es como podríamos resumir la principal función de las medias de compresión, un producto sanitario del que, probablemente, hayas escuchado hablar en más de una ocasión. Pero, ¿en qué consiste esta prenda y para qué casos está indicado su uso?
Pues bien, las medias de compresión son, como su propio nombre indica, unas medias que producen una pequeña presión sobre las piernas. Hasta ahí parece que está claro. Pero conocer y entender todo lo relacionado con este producto sanitario es más complejo.

Pero vayamos paso a paso. Hemos mencionado que esta prenda ayuda a prevenir y tratar los problemas circulatorios, pero, ¿cómo actúa? Lo que hacen es lo siguiente, realizan una compresión en la pierna para que la sangre circule hacia arriba. Es decir, ayuda a que la sangre fluya y circule sin dificultad.
Aunque, a priori, puede parecer que medias de compresión solo hay unas, lo cierto es que hay varios. Y es que hay que tener en cuenta que esta prenda está denominada como producto sanitario, por lo que, como ocurre con los tratamientos, debe adaptarse a cada caso.
Las medias de compresión se pueden clasificar según el nivel de presión que ejerce sobre la pierna y el tamaño de la media.
Según la presión que ejerce
A la hora de escoger una media de compresión es fundamental conocer el nivel de presión que ejerce sobre la pierna. Dentro de estas prendas, encontramos diferentes tipos de medias de compresión según la presión que ejercen. Estas las que ejercen una presión leve, normal, fuerte y muy fuerte.
Eso sí, es muy importante saber que no todas las medias sirven para todo tipo de problemas circulatorios. Por ejemplo, no necesitan la misma presión las piernas de una mujer embarazada, que las piernas con varices severas.
Por ello, es fundamental que, a la hora de elegir unas medias de compresión, se consulte a un profesional especialista para no fallar en la elección y emplear un tratamiento que no es beneficioso para nuestra dolencia.
Las medias que ejercen una presión leve están indicadas, por lo general, para las mujeres embarazadas o como medida de prevención frente a las varices. Mientras que las medias que ejercen una presión fuerte lo están para problemas circulatorios de cierto nivel de gravedad.
Además de encontrar medias de diferentes tipos de presión, también las hay de diferentes tamaños: cortas, medias-largas y pantys.
Las medias cortas van hasta la rodilla. Hay algunas que cubren el pie completo, y otras que lo hacen desde el tobillo. Las medias de compresión largas llega, por lo general, hasta la mitad del muslo. Y, por último, las pantys, las medias que llegan hasta la cintura.
En cualquier caso, insistimos en la importancia de consultar a un profesional especialista sobre el tipo de media a utilizar, si escogemos unas medias sin la ayuda de un especialista, lo más probable es que nos equivoquemos en la elección y no estemos tratando nuestra dolencia de la manera correcta.
Aunque, por lo general, cuando hablamos de medias de compresión lo habitual es que lo primero que nos venga a la cabeza sea una persona con problemas circulatorios, lo cierto es que las hay para deportistas. Sí, estás leyendo bien.
Y quizás las hayas visto más veces de las que se te puede venir a la cabeza. Y es que es una prenda que cada vez utilizan más deportistas, en especial corredores. Su uso puede ser beneficioso, siempre y cuando se escoja la adecuada.
Algunos de los argumentos que dan quienes utilizan esta prenda son: reducen los dolores musculares, facilitan la recuperación y mejoran la circulación sanguínea.
Desde Hogarmania te recomendamos que, para cualquier duda que te surja, no dudes en consultar a tu médico de cabecera o profesional especialista.