¿Te apetece disfrutar de un baño relajante? El trabajo, las prisas por llegar a tiempo a los sitios y las obligaciones hacen que el dedicarnos unos minutos a nosotras sea una obligación.
La sales de baño, junto con las infusiones o las bombas de baño, son algunos de nuestros grandes aliados a la hora de disfrutar de unos minutos de relajación y tranquilidad. Ayudan a dar color y esencia al agua, ayudando a relajarte.

Es momento de cerrar los ojos, parar el tiempo y de dejar a un lado todas las obligaciones que ocupan nuestra mente. Solo estás tú, no hay nada más, relaja la mente y los músculos. ¡Saldrás como nueva!
Si no tienes sales de baño en casa tienes dos opciones, comprar unas, o preparar unas a tu gusto en casa. Si te has decantado por la segunda opción, toma buena nota porque te enseñamos a preparar una sales de baños caseras, ¡la mar de sencilla!
Ingredientes para un litro de sales de baño
- 90 cl de alcohol.
- 10 cl de acetona.
- Esencia de rosa (puedes elegir la que quieras).
- Colorante alimenticio.
- Sal marina.
Cómo hacer sales de baño caseras
- Mezcla en un bol el alcohol, acetona, colorante (puedes añadir varios colorantes para crear combinaciones) y esencia de rosas (o la fragancia que más te guste).
- Añade sal marina y deja un rato hasta ver que la sal se ha teñido y ha cogido olor.
- Después escurre las sales y déjalas sobre papel secante.
Otra opción para un baño ultra relajante son las infusiones y bombas de baño naturales.
Cómo hacer sales de baño de colores
Paso 1
Lo primero que tenemos que hacer es colocar la sal en un recipiente de cristal. A continuación, vamos a ir echando colorante natural o alimenticio para teñir la sal y darle el color que queramos. Es mejor hacerlo poco a poco e ir moviendo la sal para que se tiña de manera uniforme.
Paso 2
Al igual que hemos estado haciendo con el colorante, ahora vamos a hacer lo mismo con la esencia. De esta manera, logramos que la sal no solo tendrá el color que queramos, sino que también tendrá el olor que más nos guste.
Paso 3
Por último, podemos introducir la sal en pequeños recipientes de cristal para decorar el baño. Así, cuando queramos darnos un baño relajante, tendremos las sales a mano, y cuando no las usemos, decoraran la estancia.