Hogarmania.com
Hogarmania.com

Remedios naturales

Gotas de aceite de ajo para dolor de oídos

En Natural Style nos enseñan cómo aprovechar las propiedades antisépticas y antibióticas del ajo en aceite para aliviar el dolor de oídos. El ajo además actúa sobre el sistema circulatorio como hipotensor y regulador de la circulación sanguínea, o como se dice tradicionalmente, se usa para rebajar la sangre. También es útil para combatir las lombrices intestinales que afectan mayoritariamente a los niños. También se usa como revulsivo.

Ingredientes

  • Aceite de oliva virgen extra (dos cucharadas)
  • Dientes de ajo pelados (dos)

Preparación del aceite de ajo para los oídos

  1. Calentar el aceite de oliva hasta que esté tibio.
  2. Añadir los dientes de ajo y dejar macerar con el aceite a temperatura suave durante unos cinco minutos.

Aplicación: Aplicar mojando un algodoncillo con el aceite aún tibio y colocarlo en el oído afectado. Dejar hasta que se desee. Hay quien se pone el ajo entero en el oído y lo tapa con un poco de algodón.

Conservación: Se recomienda preparar este remedio cada vez que se requiera, ya que tiene más efecto si se aplica tibio.

Otras curiosidades

Usos del ajo
Se le atribuyen numerosas virtudes y es una de las plantas más utilizadas como medicinales. Las madres colgaban un collar de dientes de ajo pelados a sus hijos para facilitarles el proceso de dentición. Durante la Edad Media se utilizó para prevenir y curar epidemias como la peste. En la actualidad se han comprobado las propiedades desinfectantes de los ajos, mediante las cuales son capaces de eliminar determinadas especies patógenas de la flora intestinal, sin dañar otras innocuas. Hay quien come un ajo cada día en ayuno para prevenir todo tipo de enfermedades, como bien muestra el dicho "Ajo en ayuno, remedio seguro".

El olor del ajo
El ajo se utiliza en numerosos platos de cocina para dar sabor, pero tiene el inconveniente de que repite y el olor queda en el aliento, especialmente si se ha comido crudo. Para enmascarar este olor a ajo se recomienda comer después un poco de perejil y manzana, aunque muchos casi no aprecian la disminución del olor. Aceite de orégano o mejorana en flor como alternativa.