Calma el dolor muscular ocasionado por el estrés o una mala postura con estos cuatro remedios caseros de ingredientes naturales. ¡Líbrate de esta desagradable sensación!
ÍNDICE DE CONTENIDOS
Hogarmania, 25 de marzo de 2022
Remedios naturales
Calma el dolor muscular ocasionado por el estrés o una mala postura con estos cuatro remedios caseros de ingredientes naturales. ¡Líbrate de esta desagradable sensación!
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Hogarmania, 25 de marzo de 2022
Las malas posturas, el estrés, un sobreesfuerzo o un movimiento brusco pueden ser los causantes de que se nos agarroten y nos duelan los músculos. Una contractura es una contracción o rigidez de uno o más grupos musculares.
Es habitual que este tipo de dolencias se formen en el cuello, hombros y espalda. Esto ocurre porque son las partes del cuerpo a las que, consciente o inconscientemente, a más esfuerzo sometemos.
Para evitar llegar a sufrir contracturas, es recomendable estirar y calentar los músculos, ya sea después de hacer ejercicio físico o como parte de la rutina diaria.
En el caso en el que no hayas podido evitar llegar a tener alguna contractura, hay una serie de remedios naturales que te van a ayudar en la recuperación.
Conocida como el "tranquilizante natural", sus extractos y la planta seca contienen valepotriatos, un componente de la valeriana que ralentiza la actividad del sistema nervioso. Por esta razón, se recomienda su uso para el tratamiento de contracturas musculares. Su acción tranquilizante hace que el músculo se relaje y deje de estar contraído.
Esta planta se puede utilizar en:
1. Tintura
Consiste en extraer las propiedades medicinales de la raíz de la planta, en esta ocasión el de la Valeriana, utilizando agua y alcohol. El alcohol funciona como conservante de la planta y hace que la planta se conserve hasta 12 meses.
2. Maceración
Se ablanda la raíz de la Valeriana golpeándola o sumergiéndola en un líquido. Una vez hemos conseguido que se ablande, tomaremos una taza para tratar la contractura.
3 Compresas
Moja un disco de algodón en maceración o tintura y aplícalo sobre la zona del músculo contracturada.
4. Cápsula
Moja un disco de algodón en maceración o tintura diluida y aplícalo sobre la zona dolorida.
Es una planta de la que destacan sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas. Varios estudios han concluido que el efecto que produce esta planta es similar a la de los fármacos antiinflamatorios no esteroidales, como puede ser el caso del Ibuprofeno. El harpagofito se puede tomar tanto en tintura como en cápsulas y, por lo general, su consumo está exento de efectos adversos.
Un baño relajante te ayudará a reducir el dolor muscular que provocan las contracturas. Añade sal gorda en agua caliente, pues este componente incluye minerales que ayudan a relajar el músculo, algo fundamental para conseguir deshacerte de las contracturas musculares. Puedes incluir aceites de lavanda, tomillo y jengibre, entre otros, para conseguir un mejor resultado.
El magnesio es un nutriente fundamental para el correcto funcionamiento de nuestro organismo. Una de sus aplicaciones es que relaja la actividad del tejido del músculo, y como consecuencia de ello, ayuda a combatir las contracturas. Plátano, avena, nueces, garbanzos, lentejas y pan integral son algunos de los alimentos ricos en magnesio.
Es importante tener en cuenta que los remedios naturales pueden ayudarte en la recuperación de la lesión, pero no son sustitutivos de acudir al fisioterapeuta.