Decorar dormitorio juvenil con estudio rosa

Los niños crecen y las necesidades en sus dormitorios van cambiando. Una adolescente necesita una mesa de estudio y un lugar más espacioso y ordenado.

Para comenzar con un cambio, lo primero es pensar en la línea de color. En este caso, hemos mantenido el rosa pero en un tono mucho más suave, ya que los tonos claros aportan más amplitud y claridad a la estancia. La pintura la hemos combinado con un revestimiento de PVC que imita maderas gastadas en tres colores suaves, dándole protagonismo a la pared principal. Y para el suelo nos hemos decantado por un roble envejecido, que también aporta luminosidad y amplitud a la estancia.

Para este ambiente más calmado y agradable hemos recuperado dos piezas y las hemos transformado. Además de pintarlos parcialmente de blanco, hemos dado nueva vida al armario, forrando las baldas con un papel claro, y así obtener más luz en el interior. A partir de ahora no hay excusa para no organizar la ropa y objetos personales ordenadamente.

Las piezas de almacenaje las hemos colocado a este lado, y hemos completado la zona con una hermosa mesa de estudio y una silla rosa, para aprovechar la luz natural, que es fundamental para un buen ambiente de estudio.

Para una niña pre adolescente no podía faltar un espejo. Hemos recuperado esta puertaventana, la hemos lijado y le hemos sustituido los cristales por el espejo, para colocarlo al lado del armario. Los espejos, además de ser complementos muy decorativos, son capaces de potenciar la luminosidad y ampliar el espacio visualmente.

Hemos completado el mobiliario recolocando la cama a este lado de la habitación con una mesilla grisácea y una pequeña lámpara. Y la hemos vestido con ropa de cama blanca y verde con estampado geométrico.

Orden y limpieza, esa ha sido la labor que hemos realizado para conseguir un espacio íntimo más relajado, organizado y acogedor.

👉 Reformado por: 1.350 euros

Pasos para decorar un dormitorio juvenil con estudio rosa

Antes
Vamos a decorar un salón de de 8,40 m2 con paredes rosas, suelo sapelly, estanterías altas y desordenadas. Ver fotos del antes.

Paso 1
Vamos a pintar las paredes rosas de un color rosa más suave. Para ello protegemos las puertas y esquinas con cinta de carrocero y aplicamos la pintura plástica primero con brocha por las esquinas y después con rodillo por toda la superficie. La pared principal del dormitorio la dejamos sin pintar porque la vamos a revestir.

Paso 2
Vamos a revestir la pared principal con lamas de PVC imitación madera desgastada en tres tonos que alternaremos. Para ello, primero debemos fijar primero unos perfiles en la pared, tienen dos componentes. Primero se fija una aprte a la apred, se pegan las lamas y encima la otra parte del perfil que hará de embellecedor. las esquinas de la pared cortados a meddia y pegados con cinta de do

Paso 3
Fija el perfil en las esquinas de la pared principal retirando el papel de la cinta de doble cara y presionando.

Paso 4
Cortaremos las lamas de PVC a medida con sierra de calar.

Paso 5
Aplicamos detrás de cada lama adhesivo de montaje y cinta de doble cara.

Paso 6
Vete pegando las lamas la pared, empezamos por el zócalo inferior y vamos subiendo fila por fila hacia el techo alternando lamas en diferentes tonos. Al terminar de pegar todas las lamas colocaremos en los bordes la otra parte de los perfiles.

Paso 7
Vamos a transformar una puerta de ventana en un espejo. Para ello, nos protegeros los ojos con unas gafas protectoras y las manos con guantes, quitaremos el cristal, lijaremos la estructura y pegaremos con adhesivo espejos cortados a medida de cada hueco.

Paso 8
El armario junto a la ventana lo vamos a renovar. Pintaremos el interior y los cajones con esmalte de color blanco y el resto lo dejaremos en madera natural.

Paso 9
Las baldas del armario las forraremos con papel vinílico que pegaremos con cola de empapelar.

Paso 10
El espejo efecto desgastado lo colocaremos en la pared, ¡será perfecto para esta coqueta adolescente!

Paso 11
Completamos la decoración colocando bajo el ventanal una mesa de estudio y una silla rosa, para aprovechar la luz natural. Recolocamos la cama a este lado de la habitación con una mesilla grisácea y la revestimos con ropa de cama blanca y verde con estampado geométrico.

¡Reto conseguido! Hemos decorado un dormitorio juvenil con estudio en tonos rosas.