Cómo construir un tutor o guía para las plantas

Si tenéis en casa plantas débiles, tiernas o trepadoras que queréis enderezar y no lo conseguís y se caen al suelo, no os preocupéis. En este consejo de Jardinatis, os explicamos la técnica de rodrigar.

Cuando hablamos de rodrigar, hablamos de construir un tutor o guía para nuestras plantas que, además, de dirigir su crecimiento, les proporciona un aporte de nutrientes.

Cómo construir un tutor o guía para las plantas

En primer lugar, para rodrigar, necesitaréis un palo de caña cuya longitud variará en función de la altura que queramos que alcance nuestra planta.

Cortamos un trozo de malla plástica, la que se suele utilizar como mosquitera para algunas ventanas. Tendrá una anchura de unos 25 centímetros y la altura del palo que hemos elegido. El agujero de la trama será de 2 o 3 milímetros.

Hemos optado por una manera de rodrigar que respeta el medio ambiente, por eso, hemos prescindido de elementos tan vitales como el musgo. En su lugar, empleamos hojas secas de plátano y turba, todo ello nutrirá a la planta.

Colocamos las hojas secas sobre la red de plástico y, después, añadimos sobre ellas una columna de turba.

Introducimos el palo y enrollamos la red.

Con cuidamos enrollamos una serie de alambres que sujetarán la guía o tutor.

Una vez acabado esta operación, introducimos todo en la tierra. Aprovecharemos los extremos de los alambres que rodean la guía para sujetar y levantar algunos de los tallos de la planta.

Tened presente que es conveniente humedecer con frecuencia nuestra guía.