Productos de limpieza, ¿qué y cuándo utilizar?

Limpiacristales

Este producto limpia ventanas y muchas cosas más, se evapora rápidamente y no deja huellas. Lo podemos utilizar en espejos, cristales, fregaderos, electrodomésticos, baldas del frigorífico, puertas de los armarios, encimeras de cocinas, etc.

Desengrasante

Usaremos este producto para disolver la grasa, removido o esparcido. Elimina las manchas de grasa de las paredes, puertas, interruptores eléctricos, residuos de comida de la encimera de la cocina, la grasa incrustada en los rodapiés y la suciedad exterior de los muebles. Y no nos olvidemos que para darle brillo, pasaremos un trapo seco eliminando así la capa tenue que dejan.

Limpiador de baños

Como su propio nombre indica, lo utilizaremos para limpiar una de las zonas más complicadas de nuestro hogar como es el baño. El producto tiene que ser 3 en 1 y servir para acabar con los restos de jabón, el moho y los residuos minerales.

Los líquidos espesos necesitan ser activados un tiempo para que cumplan su fin, el de desinfectar las superficies, disolver los minerales y acabar con la grasa. Lo dejaremos reposar el tiempo que indica la etiqueta para posteriormente restregar el cepillo y finalmente, aclarar a fondo.

Otra opción para desinfectar a fondo objetos, electrodomésticos y superficies es la lejía, también conocida como lavandina.

Productos abrasivos

Los productos de limpieza químicos se emplean para disolver y eliminar la suciedad. Contienen algunas partículas abrasivas que aumentan la acción limpiadora. Actúan como el papel de lija, friccionando y removiendo la suciedad más resistente. Estos productos tienen diferentes intensidades siendo empleados para resolver diferentes situaciones.

Además de estos productos indispensables, existen otros específicos destinados a limpiar superficies concretas.

Quitamanchas de aceite y grasa: los productos de petróleo destilado sirven para eliminar los residuos de grasa, al igual que los restos de chicle, aceite o adhesivos.

Productos antical: una solución muy corrosiva para los residuos que dejan las aguas duras.

Para las manchas de óxido: creados para eliminar los óxidos de las pilas, baños e inodoros que pueden producirse en las zonas donde el agua contiene hierro.

Para el acero inoxidable: hay productos específicos para limpiar, proteger y abrillantar los fregaderos, superficies, cazuelas y sartenes de acero inoxidable.