¿Qué hacer con la albahaca en otoño e invierno?

Si has conseguido mantener la albahaca viva hasta el otoño, ¡nos quitamos el sombrero!

Muchas veces, y a pesar de seguir a pies puntillas los cuidados que requiere esta plante, es difícil lograr que esta planta nos aguante hasta el otoño. Y, una vez que lleguen los primeros fríos, al ser una planta anual, será imposible mantener.

La albahaca es una planta muy sensible a las heladas. Se cultiva por semillas que se pueden plantar bien en semilleros o en macetas en primavera.

Hay que tenerlas en un lugar soleado, ya que no toleran el frío aunque, en la época de verano, cuando hace mucho calor, es conveniente ponerlas en un lugar con algo de sombra.

Además, necesitan de un suelo húmedo y con un buen drenaje para desarrollarse completamente porque, de lo contrario, puede ser atacada por un hongo y morir.

Un invierno sin albahaca

Entonces, la respuesta a qué hacer con la albahaca en otoño e invierno es nada.

Como hemos dicho anteriormente, la albahaca es una planta anual y su ciclo termina cuando llega el frío o los días se empiezan a acortar.

¿Aguantan todas las plantas aromáticas el rigor el invierno?

Si la tenemos en el interior del hogar es posible que aguante algo más de tiempo pero, finalmente, la albahaca terminará secándose y muriendo.

Detrás de las flores dejará unas pequeñas semillas que podemos sembrar en primavera y, así, volver a disfrutar de la albahaca en verano.