Ibai Llanos prueba la pizza más cara del mundo y su veredicto es claro: 'Quiero llorar'
Ibai Llanos sigue explorando su faceta más gastronómica para deleite de todos los amantes de la comida y su nueva aventura le ha llevado a Nueva York a probar las pizzas más raras del mundo, entre las que se encontraba la más cara del mundo.
Y tiene claro su veredicto acerca de ella. '¿Quiero llorar? Sí'. ¿Pero será de pena o de emoción?
Después de que Ibai Llanos visitara el mejor restaurante del mundo, su nueva aventura gastronómica le ha llevado a Nueva York, donde además de comer en la hamburguesería favorita de Bad Bunny, ha hecho una ruta para probar las pizzas más raras del mundo.
Y empieza fuerte la ruta en Industry Kitchen, al sur de Nueva York, probando la que en 2017 consiguió el título pizza más cara del mundo. 'La más cara del mundo, que no significa la mejor', apunta Ibai.
¿Y por qué está pizza se hizo con el récor de la más cara del mundo con su loco precio de 2.000 euros? Por sus lujosos ingredientes.
'Lleva oro, la masa es de tinta de calamar, queso, foie gras, caviar y unas flores. ¿Tiene buena pinta? ¿Os apetece? La verdad, hay que decirlo, es que tiene pinta poco apetecible. Parece que la ha hecho mi primo de 7 años, con todos mis respetos, pero parece una pizza de Art Attack', dice con sorna Ibai.
El veredicto de Ibai Llanos sobre la pizza más cara del mundo
Cuando da el primer bocado, la cosa mejora. 'Sabe muchísimo a foie gras y muchísimo a caviar. La verdad es que está buena. Me ha sorprendido, está mejor de lo que aparenta'.
Pero llega el veredicto final: ¿realmente merece la pena pagar 2.000 dólares por una pizza? 'Si te soy sincero, si me dices que vale 15 o 20 euros, me lo creo. He pagado 2.000'. 'Como pizza está buena. ¿Entra en mi top 5 de pizzas que he comido en mi vida? La verdad es que no. ¿Lo repetiría? La verdad es que tampoco. ¿Lo he pagado? Sí. ¿Quiero llorar? Sí', reconoce el streamer bilbaíno después de comerse la pizza más cara del mundo.
'Así como dato, he tardado 30 bocados en comerme la pizza, lo que significa que cada bocado me ha costado 50 euros'. Casi que era mejor no haber echado cuentas, Ibai...
Después de probar la pizza más cara del mundo, Ibai sigue su ruta en el centro de Manhattan, en Krave it pizza & Sandwich joint, 'un sitio muy pequeño, pero con una variedad de pizzas que yo no había visto en mi vida'.
El propietario, Vishee, abrió hace 10 años por su pasión por la comida, sándwiches y pizzas. 'Siempre me ha gustado ser creativo, salirme del molde', explica a Ibai.
Pizzas con hamburguesas y macarrones
Y vaya si lo hace porque sirve tres pizzas saladas, a cada cual más atrevida. La primera es una pizza de hamburguesa con carne, huevo, tomate, salsa chipotle y hasta patatas fritas.
'Está viniendo hasta la ambulancia porque sabe que me va a dar algo', dice Ibai, que reconoce que 'es lo mismo que comerte una hamburguesa', pero le da su aprobado.
'Es una guarrada, pero está muy buena', opina. La segunda pizza es de macarrones con queso, el clásico mac&cheese. '¡Brutal! Es como comer pasta con pan. La mejor pizza de lo que va de día'.
La tercera pizza salada ofenderá a muchos mexicanos e italianos, ya que fusiona los dos platos más clásicos de ambos países: pizza de taco, 'con todos los ingredientes que tendría un taco'.
En un principio la pizza no le ilusiona a Ibai, pero en cuanto le da el primer bocado... 'Está buenísima, macho. Tengo que decir que es mi favorita, es como comerme una ensalada con pan, básicamente'.
Los precios de estas pizzas están muy alejados de la pizza más cara del mundo, ya que valen 6,5 dólares, un precio nada alto teniendo en cuenta los desorbitados precios de Nueva York. 'Son bastante grandes, con dos porciones te quedas bastante bien'.
Su periplo por este pequeño bar del centro de Manhattan acaba con una pizza de oreo fruta. 'Esto me está matando, pero os voy a ser sinceros: está cojonuda. Lo muerdes y sientes como el azúcar se impregna en ti', dice mientras camina por la calle para dirigirse a su última parada.
La mayor monstruosidad
'Después de estar a punto de fallecer porque lo que nos estamos enchufando en el día de hoy no tiene nombre, vamos a por la pizza más rara que he visto y seguramente vosotros también'.
Las expectativas estaban altas, pero la verdad es que la realidad las supera, porque lo que enseña a continuación tampoco tiene nombre.
Es en Vinnies y la pizza cuesta 65 euros. 'Bienvenidos a una de las mayores monstruosidades que he visto nunca. Jamás pensé que la mente humana diera para una creación con tantas calorías, tanto pan y tantísimo queso', dice Ibai.
Y es que la peculiaridad de esta pizza es que la caja en la que va empaquetada es otra pizza. Sí, lo que lees. 'Fijaos qué cosa más rara: tú pillas un trozo y debajo hay pizza'.
Eso sí, la espectacularidad de esta pizza queda ahí porque debajo de esa pizza-caja solo hay una bastante vulgar pizza de pepperoni.
'Como pizza es bastante floja, os habréis comido 100 pizzas mejores que esta, pero es curioso y hay que probar cosas en esta vida'.
