¿Cómo limpiar la tapicería de un sofá de forma efectiva?
Descubre los métodos más sencillos para limpiar la tapicería del sofá y dejarla impecable, incluso si no tienes experiencia.
Sillón de descanso durante el día y cama improvisada para algún invitado de noche, el sofá es un mueble en el que pasamos gran cantidad de tiempo. Es completamente normal que acabe lleno de polvo, migas e incluso manchas orgánicas como restos de alimentos o goteo de bebidas. Pero,..., como todo en la vida, ¡hay solución! Hoy te dejo una guía completa para aprender a limpiar la tapicería del sofá, incluso si no tienes experiencia.
Materiales necesarios para limpiar la tapicería de un sofá
Antes de comenzar, vamos a conocer qué materiales son necesarios para dejar impecable nuestro sofá.
Limpiador de tapicería
En el mercado puedes encontrar una amplia gama de limpiadores para sofás. Antes de elegir uno, ten en cuenta el tipo de tela del sofá, la gravedad de las manchas y tus preferencias personales.
- Limpiadores en seco : Son fáciles de usar y no requieren agua ni dejan residuos. Ejemplos: Limpiador en espuma y los champús para tapicerías. Estos son ideales para limpiar los sofás de piel .
- Limpiadores a base de agua : eliminan las manchas difíciles de las tapicerías pero pueden dejar residuos.
- Limpiadores enzimáticos : limpian la tapicería con delicadeza. Son una excelente opción para las personas con alergias a los productos químicos.
- Limpiadores de vapor : la tradicional vaporeta es una excelente herramienta para desinfectar y limpiar tapierías.
- Limpiador casero : una mezcla de bicarbonato y vinagre es ideal para limpiar las manchas de un sofá de tela .
Aspiradora
Aunque puedes limpiar el sofá con otras herramientas, una aspiradora ahorra tiempo y retira con facilidad el polvo, las migas y pelusas.
Pasos para limpiar la tapicería de un sofá
¿Cómo preparar el sofá antes de limpiarlo?
Prepara el sofá para su limpieza con una aspiración completa del armazón. Esto implica retirar los asientos, brazos y respaldos del sofá (siempre que sea posible) y desempolvarlos. Retira también los cojines y manchas. Límpialos por separado.
Tras desempolvar el sofá, aplica el limpiador de tapicería por toda la superficie y cepilla suavemente hasta eliminar las manchas. Sigue en todo momento las instrucciones del fabricante y no te pases con las cantidades.
¿Cómo eliminar las manchas y la suciedad de la tapicería?
Existen varios técnicas para quitar las manchas del sofá. Te enseñamos las más conocidas, el resto, queda a tu elección:
Vinagre: elimina las manchas de la tapicería del sofá pasando por las zonas sucias un trapo humedecido en una mezcla de vinagre blanco, agua tibia y jabón de platos.
Bicarbonato: espolvorea bicarbonato sobre la mancha en el sofá ,y seguidamente, rocía vinagre. Deja que mezcla por cinco minutos antes de retirar con un cepillado suave en círculos.
Amoníaco: si el sofá tiene manchas amarillas o huele mal, límpialo con una mezcla de amoníaco líquido y agua tibia.
Agua oxigenada: si la tapicería tiene manchas de sangre aplica agua oxigenada sobre la mancha, espera 5 minutos, cepilla y retira los restos con un paño húmedo.
Lava-aspiradora: es un electrodoméstico que limpia con agua a presión textiles como sofás, alfombras, moquetas, sillones tapizados.
¿Consejos para el cuidado de la tapicería de un sofá?
¿Cómo evitar que la tapicería se ensucie?
Principalmente, hay cinco accesorios que protegen el sofá y evitan que se ensucie.
- Funda de sofá : protegen el sofá de la suciedad, el polvo y las manchas. Destaca por su diversidad de diseños, colores y materiales.
- Mantas : las mejores aliadas para evitar que el sofá se desgaste o adquiera manchas difíciles.
- Reposabrazos : protegen las zonas más propensas al desgaste. Además, agregan un toque de comodidad.
- Cojines : al igual que las mantas, protegen el sofá de las manchas y el desgaste.
- Protector de muebles : si tienes gatos, también puedes proteger tu sofá con una funda adhesiva transparente.
Es importante mantener y cuidar tu sofá para que dure muchos años. Esto incluye aspirarlo regularmente, limpiarlo con un paño suave y húmedo y evitar colocarlo a la luz solar directa.
