El lugar más dulce y fotogénico de Barcelona que conquista a grandes y pequeños

Si eres un amante de las golosinas o simplemente, quieres pasar un rato en un lugar de lo más ‘instagrameable’, toma nota de este nuevo espacio inaugurado hace apenas unos días en pleno corazón de Barcelona.

En el número 620 de la Gran Via de les Corts Catalanes, ha abierto sus puertas House of Candy, un universo de fantasía donde los caramelos no solo se comen, también se sienten, se huelen, se pisan (literalmente) y hasta se saltan. Con más de 2.000 metros cuadrados distribuidos en 10 salas temáticas, esta instalación se ha convertido en uno de los espacios más virales y fotografiados de la ciudad, después de 10 meses de obras, ya antes era un aparcamiento.

Aunque su nombre pueda sugerir simplemente una tienda de golosinas, House of Candy es mucho más: es una mezcla de parque temático, museo interactivo y experiencia gastronómica sensorial que fascina tanto a niños como a adultos.

¿Qué encontrarás en House of Candy?

Cada sala tiene su propio concepto estético y sensorial. Desde una piscina gigante de bolas hasta un tobogán de dos plantas, pasando por una zona para escuchar cómo suenan los caramelos al caer o al desenvolverlos, una sala de relax bajo un globo aerostático. El recorrido está pensado para despertar la imaginación y los sentidos.

Hay espacios dedicados a adivinar sabores, oler ingredientes ocultos o sentir el crujido de los caramelos bajo los pies. Todo está cuidadosamente decorado con neones, macarons gigantes, piruletas, bastones de caramelo, osos de golosina gigantes y glaseados que parecen recién salidos de una pastelería de fantasía.

Aunque no sea un espacio gastronómico al uso, House of Candy ofrece una experiencia lúdica en la que la comida (en este caso, los dulces) se convierten en protagonistas escenográficos. Es una manera distinta de disfrutar del universo del sabor y los sentidos, que conecta con la cocina desde un enfoque emocional, casi onírico.

Además, si eres cocinillas o repostero aficionado, te irás lleno de ideas decorativas, combinaciones cromáticas y ganas de montar tu propia mesa dulce en casa con brochetas de chuches o nubes de arándanos con gelatina.

Dulces que también se saborean: cafetería con sello gourmet

Al final del recorrido, la experiencia gastronómica se redondea con una parada en su cafetería, que no es cualquier sitio para tomar algo. Aquí se sirve café de especialidad y helados artesanos de Paral.lelo, una de las heladerías más reputadas de la ciudad. La carta incluye gofres, pasteles y bebidas con toppings dulces que combinan a la perfección con la temática del espacio.

Y puedes acceder a esta zona sin necesidad de hacer el recorrido completo, por si solo quieres disfrutar de un café en un entorno que parece sacado de un videoclip de Katy Perry.

¿A quién está dirigido este espacio del mundo dulce?

House of Candy está pensado para todos los públicos. Familias con niños pequeños, grupos de amigos que buscan una experiencia diferente o incluso parejas que quieran una cita original.

Además, se está convirtiendo en punto de referencia para foodies que buscan contenido visual impactante: es el lugar perfecto para grabar reels, stories o vídeos de TikTok entre caramelos de colores y paredes llenas de merengue visual.

Horarios, entradas y consejos para tu visita

Horario: abre todos los días de 11:00 a 21:00. La última entrada es a las 19:30.

Entradas: rondan los 15–17 € para adultos y 10–12 € para menores de 12 años. Menores de 2 años, gratis.

Accesibilidad: totalmente adaptado para personas con movilidad reducida y cochecitos de bebé.

El recorrido dura entre 60 y 90 minutos, y puedes comprar las entradas online. También puedes combinar la visita con otras actividades en Barcelona, como el Museo White Rabbit.