Cómo instalar una puerta metálica

La puerta más importante de una casa es, sin duda, la de la entrada. Además de ser la carta de presentación de los habitantes de esa vivienda, debe proporcionar la mayor seguridad posible.

Por este motivo, en esta ocasión, os vamos a enseñar a instalar una puerta de entrada metálica en block, con un acabado de madera, que además de protegernos, quedará estéticamente vistosa.

Paso a paso para instalar una puerta metálica

Antes de comprar la puerta, debemos medir adecuadamente el hueco en el que la vamos a instalar. Mediremos el alto y ancho en varios puntos y tomaremos en consideración el más pequeño.

A continuación, presentamos la puerta en block en el hueco para comprobar que encaja en todos los puntos. En caso contrario, solucionamos el problema abriendo o cerrando el hueco.

Paso 1
Este tipo de puerta se fija al muro mediante unas patillas metálicas de anclaje que hay en los laterales del marco. Para garantizar una sujeción fuerte y duradera de la puerta, es importante que las patillas que están en el lado de las bisagras las ubiquemos a la altura de las mismas y las del otro lado a 20 centímetros de los extremos.

Paso 2
Presentamos la puerta, bien enrasada, en el hueco y marcamos las zonas de sujeción en la pared. Es conveniente dibujar un área más amplia que el tamaño del anclaje, para que se pueda fijar mejor.

Paso 3
Con el cortafríos y una maceta, picamos en toda la zona señalada hasta llegar al ladrillo macizo del muro. Para trabajar con mayor seguridad, nos colocaremos unos guantes y unas gafas de protección.

Paso 4
El siguiente paso consiste en soltar la pletina inferior de la puerta, con los soportes, y presentar el conjunto en el suelo. Marcamos los puntos de fijación y taladramos. Para realizar esta tarea, utilizaremos el taladro y una broca de widia del diámetro adecuado.

Paso 5
Después, colocamos de nuevo la pletina en el suelo, introducimos unos tacos y fijamos los soportes con sus correspondientes tirafondos. Para insertarlos, tendremos que sustituir la broca por una punta que se adapte al tamaño y a la forma de la cabeza del tornillo.

Paso 6
Una vez que hayamos atornillado las dos sujeciones, retiramos la pletina y doblamos las patillas de anclaje en V.

Paso 7
Ponemos la puerta en el hueco y la ajustamos. Tendremos que dejarla perfectamente aplomada, insertando cuñas donde sea necesario. Para hacer este trabajo, nos ayudaremos de un nivel de burbuja.

Paso 8
A continuación, afianzaremos la sujeción de la puerta en el muro con esparto y escayola. Para eso, vertemos agua en la gaveta y añadimos escayola.

Paso 9
Después de removerlo, añadimos el esparto y comenzamos a rellenar los huecos de la pared. Es importante meter bien la mezcla hasta el fondo, remetiéndola entre los restos de ladrillos y abrazando las patillas metálicas del cerco.

Paso 10
Una vez que el producto se haya secado, rematamos los anclajes aplicando yeso de forma regular y uniforme. Es decir, debemos dejar la superficie lo más raseada posible.

Paso 11
Luego, rellenamos las juntas entre la puerta y la pared con espuma de poliuretano. Agitamos bien el bote y colocando el envase hacia abajo, aplicamos el producto. Nos ponemos unos guantes de látex.

Paso 12
Transcurrido el tiempo de secado que nos indica el fabricante, retiramos el sobrante con un cortante.

Paso 13
Vamos ahora con el acabado. Repasamos bien la superficie con la lijadora provista de una hoja de lija de grano fino, retiramos el polvo producido y damos una masilla de acabado.

Paso 14
Esperamos a que ésta se seque y pintamos la pared.

Paso 15
Finalmente, fijamos las jambas con adhesivo de montaje. Siguiendo las pautas que os hemos dado, vosotros también podréis colocar una puerta batiente metálica en block, sin problemas. El sistema de puerta de entrada en block hace la instalación muy sencilla, ya que el marco y la hoja de la puerta están preinstalados y solo hay que anclarla a la estructura del muro.