Ingredientes (4 personas):
- 4 huevos
- 2 lonchas gruesas de jamón cocido (250 g)
- 2 patatas
- 200 g de queso mozzarella rallado
- 250 ml de salsa de tomate
- 20 hojas de albahaca
aceite de oliva virgen extra - sal
- perejil
- Para la masa:
- 500 g de harina de fuerza
- 295 ml de agua
- 15 g de sal
- 20 g de levadura fresca de panadería
- 20 ml de aceite de oliva virgen extra
- sémola de trigo duro (para estirar)
Receta de pizza de jamón, patatas y huevo paso a paso
Pon la harina en un bol grande. Diluye la levadura en el agua y viértela sobre la harina. Añade el aceite y la sal, y mezcla los ingredientes con una espátula. Tapa la masa con film de cocina y deja que repose a temperatura ambiente durante 30 minutos. Retira la masa del bol, pásala a la encimera y amásala (durante 5 minutos aprox.).

Colócala en el bol, tápala de nuevo con film de cocina y deja que fermente a temperatura ambiente hasta que doble su volumen, entre 90 y 120 minutos.

Retira la masa del bol, espolvorea la encimera con un poco de sémola y estírala bien hasta formar un rectángulo del tamaño de la bandeja del horno. Cubre una bandeja de horno con papel de horno y coloca la masa encima.

Calienta una sartén con abundante aceite. Pela las patatas, córtalas en bastones y fríelas hasta que se doren. Retira y escúrrelas sobre un plato cubierto con papel absorbente de cocina.

Cubre la masa de pizza con la salsa de tomate. Corta el jamón cocido en tiras y espárcelo sobre el tomate. Distribuye encima las patatas, espolvoréala con el queso y hornéala a 200º durante 12-15 minutos. Corta la pizza en 4 porciones y sirve un trozo en cada plato.

Pon a calentar la sartén donde has frito las patatas. Fríe los huevos, sazona y coloca uno sobre cada trozo de pizza. Pica las hojas de albahaca y salpica las pizzas. Adorna los platos con unas hojas de perejil.

Consejos para hacer pizza de jamón, patatas y huevo
La base de las pizzas es una masa elaborada con harina, agua, sal, levadura y aceite cubierta de salsa de tomate y queso. A partir de aquí la podéis tunear a vuestro gusto.
Existen grandes clásicos de la cocina en cada región y huevos con patatas y jamón es uno de ellos. Un plato exquisito que en esta ocasión lo aplicaremos a la pizza que hemos preparado.
Conseguiremos el huevo frito perfecto si su clara está completamente cuajada, su yema perfectamente líquida y una crujiente puntilla a su alrededor. Para lograrlo, es necesario tener en cuenta dos aspectos: la cantidad de aceite a utilizar y su temperatura.