Cómo hacer una bechamel vegana ¡paso a paso!

Se trata de la otra cara de la original bechamel elaborada con leche y mantequilla. Una salsa igual de buena e irresistible pero sin usar ningún ingrediente de origen animal. Simplemente con aceite, harina y tu bebida vegetal favorita, ¡haremos una completamente vegana! Los pasos nos los da Karlos Arguiño.
Y aunque la canción dice bésame, bésame mucho, a nuestro cocinero favorito le encanta cantarla en su versión bechamel, bechamel mucho. ¿Te apuntas tú también a este karaoke del sabor? ¡Empieza con una salsa bechamel diferente y vegana!
Raciones
1
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
10 m
Cocinado
10 m
Tiempo total
10 m
Ingredientes
- 75 gr. harina
- 1 litro bebida de avena sin azúcar
- nuez moscada
- pimienta
- chorrito de aceite
Cómo hacer bechamel vegana
Añade un chorrito de aceite en una cazuela e incorpora la harina.

Remueve bien con una varilla de mano para que se cocine la harina por todos los lados y una vez integrada, añade la bebida de avena poco a poco.

Remueve sin parar para que no se pegue en la cazuela e incorpora la leche poco a poco según vaya espesando. Una vez lista, salpimenta con nuez moscada, sal y pimienta ¡y lista!
Ya podrás degustar tu bechamel vegana en cualquier plato de pasta o lasaña vegana.

Preguntas que te pueden surgir
¿Puedo usar otro tipo de leche vegetal?
Por supuesto, puedes elegir la bebida vegetal que más te guste. En este caso, Karlos Arguiñano ha escogido una leche de avena, pero puedes optar por una de soja, de almendra o cualquiera que tengas por casa.
Simplemente con cocinarla junto a la harina, verás como se espesa obteniendo un resultado espectacular y muy apetitoso. ¡Igualito al de la bechamel tradicional!
En qué recetas puedo usar la bechamel vegana
¡En muchísimas! Ten en cuenta que es igual que la bechamel original pero usando ingredientes veganos. Así que con ella podrás preparar unas riquísimas croquetas, una lasaña o usarla como salsa en cualquier plato de pasta que te venga a la cabeza.
Incluso puedes usarla en risottos o como salsas sobre verduras o menestras. ¡Quedará de cine!