Plato festivo para compartir
La tabla de quesos y embutidos que Joseba Arguiñano monta en un momento
Un picoteo práctico y vistoso para reunir a amigos y familia
El éxito de una buena tabla empieza por elegir bien: un buen queso, un chorizo y un salchichón sabrosos y un pan con buena corteza que acompañe sin restar protagonismo. A partir de ahí, el corte marca la diferencia.
Joseba Arguiñano trabaja con sus cuchillos Arcos, esos que hacen que todo resulte más fácil: el dentado que abre el pan sin pelearse con la miga, el de embutidos que deja lonchas finas y apetecibles y el de quesos que respeta la textura de cada pieza.
Con un vino que acompañe la selección, la tabla se monta casi sola. Un picoteo sencillo y vistoso, muy de estas fechas, que invita a brindar, compartir y alargar la sobremesa sin prisas.
Índice de contenidos
Ingredientes
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200 gramos de queso
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100 gramos de chorizo
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100 gramos de lomo embuchado
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100 gramos de salchichón
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pan de hogaza
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vino
Raciones
4
Coste
Bajo
Dificultad
Fácil
Preparación
15 m
Tiempo total
15 m
Alérgenos
Leche
Gluten
Sulfitos
Paso a paso
Corta el pan en porciones cómodas
Con el cuchillo panero Arcos, corta la hogaza o focaccia de forma limpia, sin aplastar la miga. Las piezas deben quedar firmes, con buena textura y tamaño de bocado.
Prepara los embutidos en lonchas finas
Usa el cuchillo de embutidos Arcos para obtener cortes finos y homogéneos de chorizo, lomo y salchichón, lo que mejora la presentación y facilita el picoteo.
Corta el queso en piezas regulares
Con el cuchillo de quesos Arcos, divide la pieza en bastones o cuñas. La hoja especial evita que la pasta se adhiera y mantiene un corte limpio.
Monta la tabla con equilibrio visual
Coloca cada ingrediente con orden. La idea es seguir una composición ordenada y agradable, similar a la que se recomienda en este artículo con trucos para montar una tabla de quesos.
Abre el vino con comodidad
El sacacorchos eléctrico Arcos extrae el corcho con facilidad y sin esfuerzo. Un guiño práctico que aporta comodidad y un acabado más elegante al momento de servir.
Consejos y trucos
Deja respirar el queso, sácalo de la nevera unos 20-30 minutos antes. A temperatura ambiente desarrolla mejor su aroma y textura, y los cortes se sienten más cremosos.
Completa la tabla con frutos secos, fruta fresca o pequeños cuencos de miel o mermelada para aportar contraste de sabores y un toque más festivo.
Elige un vino que acompañe, no que eclipse tipo: blancos afrutados, tintos jóvenes o un espumoso ligero. Funcionan bien con el queso y refrescan los embutidos. Y si te apetece probar algo más especial, el txakoli es una opción sorprendentemente buena: su frescura realza el queso sin cubrirlo, aquí tienes una guía sobre cómo maridar quesos con txakoli.
Colocar los ingredientes todos al mismo nivel hace que la tabla se vea plana. Alterna cuñas, bastones, lonchas y pequeños montones; crear pequeñas alturas o 'capas' aporta dinamismo visual y facilita que cada producto se identifique de un vistazo.
Preguntas y respuestas
¿Cuánta cantidad necesito para una tabla de 4-6 personas?
Con 150-200 g de queso y unos 200-250 g de embutido es suficiente para que la tabla resulte completa sin excesos. Si es un picoteo más festivo o hay varios vinos en juego, puedes aumentar ligeramente las cantidades.
¿Qué tipo de pan es el más adecuado?
Un pan con buena corteza y miga tierna siempre funciona: una hogaza clásica, una focaccia o incluso un pan de aceite de oliva con aceitunas que encaja muy bien con quesos y embutidos, y suma matices sin restar protagonismo a la tabla.
Para un toque más crujiente -y muy típico en fechas festivas- también puedes incluir regañás andaluzas, que aportan textura y acompañan de maravilla.
¿Cómo mantener la tabla atractiva durante toda la comida?
Evita sobrecargarla y reserva una parte de los ingredientes para ir reponiendo. Así se mantiene limpia, ordenada y visualmente apetecible.