Transforma tu labial seco en uno hidratante y brillante con este sencillo truco

¿Te ha pasado que encuentras ese labial que te encanta, pero cuando lo vas a usar, está seco o quebradizo? A muchas nos sucede que, con el tiempo, nuestros labiales pierden su textura original, haciéndose incómodos de aplicar.
Pero no te preocupes, ¡no tienes que desecharlo! Con un truco muy fácil y económico, puedes transformar ese labial seco en uno completamente nuevo, con una textura suave, hidratante y muy brillante.
No necesitas tirar esos labiales secos o gastar en nuevos productos cuando puedes transformarlos fácilmente en casa. Este sencillo truco no solo te ahorrará dinero, sino que te permitirá disfrutar de tus labiales favoritos por mucho más tiempo, además de darle a tus labios la hidratación y el brillo que necesitan.
¿Por qué se seca un labial?
Antes de ver el truco, es útil entender por qué tu labial puede haberse secado. Los labiales, especialmente los mate, suelen perder humedad con el tiempo. Esto ocurre porque, con el uso constante y la exposición al aire, los ingredientes emolientes en su fórmula comienzan a evaporarse o deteriorarse, dejando el producto más duro y seco. En algunos casos, incluso puede agrietarse.
Materiales para transformar tu labial seco
Aquí están los elementos básicos para este truco, todos fáciles de encontrar:
- Aceite de coco o aceite de almendras: estos aceites naturales son muy nutritivos e hidratantes. El aceite de coco, en particular, es conocido por sus propiedades suavizantes y por aportar un brillo saludable a los labios.
- Vaselina o un bálsamo labial incoloro: ambos son perfectos para darle una textura cremosa y proteger los labios de la resequedad.
- Una pequeña espátula o cuchara: necesitarás algo para mezclar los ingredientes.
- Un envase pequeño y limpio: para guardar tu nuevo labial hidratante.

Paso a paso para transformar tu labial seco
Raspa el labial seco
Con una espátula o una cucharita pequeña, raspa una pequeña cantidad de tu labial seco y colócala en un envase limpio. No necesitas una gran cantidad, solo la suficiente para crear una mezcla manejable.
Añade el aceite
Agrega unas cuantas gotas de aceite de coco o almendras. Estos aceites son ricos en nutrientes y suavizan la textura del labial seco. Además, aportan brillo natural a los labios, sin dejar una sensación grasosa.
Incluye la vaselina o bálsamo labial
Añade una pequeña cantidad de vaselina o bálsamo labial. La vaselina es un ingrediente clave porque ayuda a restaurar la suavidad y proporciona una barrera que mantiene la humedad en tus labios. Si prefieres algo más ligero, puedes usar un bálsamo labial incoloro.
Mezcla bien
Usa la espátula para mezclar todo hasta que obtengas una textura homogénea. Asegúrate de que no queden grumos y que el color del labial se haya distribuido de manera uniforme en la mezcla.
Almacena tu labial renovado
Una vez que tengas la mezcla lista, guárdala en un pequeño envase cerrado. Es importante mantenerlo en un lugar fresco, lejos de la luz directa, para que mantenga su consistencia perfecta.
Este truco también funciona si tienes restos de varios labiales que ya no puedes usar, pero que aún tienen color. ¡Puedes mezclarlos todos y crear un nuevo tono personalizado! Simplemente sigue los pasos anteriores, usando los colores que desees.
Para aplicar tu labial renovado, puedes usar un pincel de labios o simplemente tu dedo. Verás cómo, además de devolverle el color a tus labios, este truco hará que se sientan más hidratados y con un brillo saludable.
Si tu labial era originalmente mate, este truco le dará un acabado ligeramente brillante, muy natural. Y si prefieres un look más brillante, siempre puedes añadir un poco más de aceite o incluso un toque de brillo labial transparente por encima.