Cómo elegir una estufa

¿Pensando ya en comprar una estufa para el invierno? Parece que al final se acaba el calor y va llegando el frío, por lo tanto hay que estar preparados. Si lo dejamos para el final, nos arriesgamos a escasez o aumentos de precio de los productos.
Entre las muchas alternativas que existen debes escoger la que más se ajuste a tu hogar. Debes pensar en las características de tu casa, valorar su precio y también tener en cuenta el coste de su utilización. Según las necesidades que tengas podrás elegir unas u otras y seleccionar alguna empresa que tenga disponibles varias tipologías, como las estufas de Ferrokey.
En este artículo, exploraremos varios tipos de estufas populares en el mercado.
Estufas de leña
La leña es una energía renovable y desde el 2022, este tipo de estufas, deben cumplir con una nueva normativa llamada Ecodiseño. Esta norma obliga a que las estufas tengan mayor rendimiento y las más bajas emisiones. Gracias a su mayor rendimiento puede suponer un ahorro de más de 150€ de combustible por temporada.

Además, suponen una reducción de emisiones: 90% menos de emisiones de partículas que una chimenea abierta, 80% menos de emisiones de partículas que una estufa de 10 años. Las estufas de leña cuentan además con cámaras de combustión muchísimo más perfeccionadas, doble cuerpo de acero de gran espesor, estanqueidad, combustión perfecta, vidrio limpio gracias a una cortina de aire caliente que impide que éste se oscurezca, mayor vida útil del aparato y por último son diseños con una enorme panorámica del fuego.
Este tipo de estufas requieren un poco más de trabajo, ya que necesitas cargar la leña y limpiar las cenizas, pero su estética clásica y su contribución a la sensación hogareña son incomparables.

Estufas de pellets
La estufa de pellets es uno de los medios más limpios y económicos del mercado, gracias a su funcionamiento y combustible.

Generan y aportan calor gracias al uso de un combustible 100% renovable: el pellet. El pellet es fabricado a base de residuos totalmente vegetales que se introducen en la estufa y se procesan gracias a la conexión eléctrica. Posteriormente, la energía calorífica es expulsada al interior de la estancia a climatizar.
Estas estufas a menudo tienen un diseño moderno y minimalista que se adapta bien a espacios contemporáneos.

Estufas de parafina
Las estufas de parafina son un sistema de calefacción silencioso, que no necesita instalación ni apenas mantenimiento. Estas estufas son portátiles y calientan rápidamente la estancia donde se coloque repartiendo el calor de forma homogénea. Pueden ser DE MECHA, no necesitan conexión eléctrica y destacan por su sencillez, únicamente para que funcionen tendrás que rellenar el depósito de combustible o ELECTRÓNICAS que se calientan más rápido y optimizan mejor el combustible. Son programables y más seguras ya que el quemador está oculto.

Estufas de gas
Las estufas de gas aportan un poder calorífico elevado, son fáciles de usar y no contaminan. Su principal ventaja es el ahorro económico.
Hay de varios tipos: INFRARROJOS: Permiten un calor muy rápido que se empieza a notar a los pocos minutos de encender los aparatos. CATALÍTICAS: Más seguro, no funciona con encendido de fuego y tiene el quemador protegido. Ahorro de hasta un 30% en el consumo de gas. LLAMA AZUL: Su poder calorífico es su gran ventaja, mayor facilidad para aclimatar grandes habitáculos. Ahorro de hasta un 30% en el consumo de gas.
Las estufas de gas son conocidas por su comodidad y eficiencia. Funcionan conectadas al suministro de gas natural o propano, lo que permite un encendido instantáneo y un control preciso de la temperatura.
Estas estufas a menudo vienen con simulaciones de llamas realistas que brindan un toque acogedor sin los inconvenientes de la leña o el carbón.
En términos de diseño, las estufas de gas están disponibles en una variedad de estilos, lo que facilita su integración en cualquier ambiente decorativo.
Además, no sólo son para interior, también existen de exterior, que son las típicas que vemos en las terrazas de los restaurantes.

Biochimeneas
Una biochimenea es un sistema de calefacción que emite calor empleando bioetanol como combustible.
La biochimenea no necesita electricidad, por lo que no necesita ningún enchufe. Cuando se enciende, no produce cenizas ni humo y no libera sustancias tóxicas para la salud. Por este motivo no es necesario instalar ninguna chimenea.
Además, no requieren una limpieza especial más allá de la limpieza normal con un paño húmedo. Proporcionan calor en poco tiempo y se puede regular la llama.
El bioetanol, por su parte, es un producto natural y renovable que proviene de vegetales ricos en sacarosa, como la remolacha o la caña de azúcar, convirtiéndose en un sistema muy ecológico para calentar cualquier estancia.

Emisores eléctricos
Un emisor eléctrico es un sistema de calefacción principal que permite disfrutar de la temperatura adecuada desde que se pone en marcha el emisor. Sin obras, ni instalación. Control de la temperatura independiente y programable (cada aparato por separado). Sin mantenimiento, humos ni gases.
Los tipos de emisores son: EMISOR SECO Calienta rápido. EMISOR FLUIDO Cuentan con un líquido caloportador que sigue generando calor después de haber alcanzado la temperatura deseada. EMISOR CERÁMICO Con bloques cerámicos de alta inercia térmica. Una vez calentados tardan horas en enfriarse disipando el calor acumulado sin consumir electricidad.

No pases frío este invierno y elige la estufa que más se ajuste en diseño y funcionamiento para crear ese ambiente acogedor en tu hogar.