¿Se puede llevar comida en el equipaje de mano del avión?

Si vas a viajar en avión este verano una de las dudas más habituales es qué comida puedes llevar en el equipaje de mano para disfrutar durante el vuelo. ¿Hay restricciones como en el caso de los líquidos? ¿Puedes llevar sopas, caldos o zumos? ¿Alimentos sólidos como frutas, bocadillos, snacks, sándwiches o bocadillos? ¿Cómo debes llevar la comida dentro tu equipaje? ¿Y si viajo con un bebé? Esto dice la normativa.
Con el verano llegan las esperadas vacaciones y nuestros planes de viajar y descubrir nuevos destinos. Si ya tienes pensado coger un vuelo y eres de los que suele viajar sin facturar las maletas, te interesa saber qué comida puedes llevar en tu equipaje de mano. Desde AENA (Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea) establecen qué alimentos están permitidos y cómo debes llevarlos para cumplir la normativa. Sigue estos consejos y evita problemas en el control de seguridad del aeropuerto.
La comida sí puedes llevar

Si son productos adquiridos en las tiendas al pasar el control de seguridad del aeropuerto, no hay problema, incluidos los líquidos, siempre que vayan en su envase y bolsa sellada correspondiente, acompañados del recibo de compra. Pero, ¿y si quieres llevar comida de fuera?
La norma general es que se permiten pequeñas cantidades para el consumo personal, salvo la restricción de productos animales y lácteos, mientras cumplan las limitaciones de tamaño y peso establecidas por la compañía y no supongan riesgo para el equipaje de mano. Si vas a llevar algún tipo de comida preparada utiliza recipientes herméticos para evitar posibles derrames y olores dentro de los bolsos o bultos que mano. En este sentido, quizás es mejor evitar llevar carnes, pescados o huevos frescos.
Si viajas dentro de la Unión Europea (UE), en general puedes llevar en el equipaje de mano alimentos sólidos como frutas y alimentos secos y sellados como barritas de cereal, frutos secos, patatas fritas o chocolates. Además, puedes transportar sándwiches o bocadillos caseros bien envasados.
Si llevas alimentos líquidos hay más restricciones. Bebidas, zumos o sopas y cremosos como salsas, yogures, queso o mermeladas deben llevarse en contenedores de menos de 100 ml cada uno, colocados en una bolsa de plástico transparente con un sistema de apertura/cierre de 1 litro de capacidad. Estos los deberás presentar por separado del equipaje de mano en los controles de seguridad.
Y un consejo final de AENA: recuerda consulta la normativa existente en el país de llegada. Algunos países no miembros de la UE tienen restricciones estrictas sobre la importación de ciertos alimentos, especialmente productos cárnicos o de origen animal o vegetal que no pasarán la frontera.
¿Y si viajas con un bebé?

Si viajas en avión con un bebé debes saber que es una situación especial que te permite llevar en el equipaje de mano los alimentos infantiles vayas a utilizar durante el viaje (vuelo de ida, de vuelta y estancia) sin límites. También en formato líquido, por lo que podrás llevar leche, agua, zumos, papillas y purés en tu equipaje de mano.
De todas formas, si va a volar con niños siempre es conveniente ponerse en contacto con tu aerolínea para tener toda la información necesaria antes de preparar el equipaje, ya que algunos requisitos pueden variar entre compañías y países.